Carlos Soler, la gran esperanza 'che'

Soler, que debutó en Liga todavía con Cesare Prandelli como técnico del Valencia, se ha convertido en tan solo cuatro meses, gracias a la confianza que ha depositado en él su entrenador, Salvador González "Voro" y a su magnífica respuesta, en imprescindible en el equipo valenciano.

El jugador ya tuvo doce minutos en su debut, en el tramo final del encuentro jugado el 10 de diciembre en Anoeta ante la Real Sociedad (3-2), en el que sustituyó a Mario Suárez.

Con el inicio del año, Voro empezó a contar sistemáticamente con Soler, quien en Pamplona ante Osasuna a principios de enero disfrutó de su primer partido completo (3-3).

Quedó de inmediato incorporado a la primera plantilla del Valencia, por lo que cambió el dorsal 28 por el 18 que luce actualmente y empezó a ser utilizado por el técnico en cualquiera de las posiciones del centro del campo.

Ha jugado en tareas de contención, en posiciones más avanzadas y escorado a cualquiera de las bandas, tal y como ocurrió en el mejor de sus partidos hasta el momento, el jugado ante el Celta, en el que cubrió la banda derecha.

En ese buen partido destacó por su quehacer en la creación del juego, su fortaleza física y, sobre todo, por el gol de la victoria de su equipo, marcado en el minuto 86 en una elegante vaselina tras una galopada no menos efectiva de su compañero Enzo Pérez, que le dejó un balón perfecto ante la meta rival.

Estudiante de periodismo en la actualidad, ha sido habitual desde niño en las gradas de Mestalla, donde se juntaba con los aficionados que aclaman su juego para seguir al Valencia.

Ahora, Soler ha devuelto la sonrisa a esos seguidores en una temporada muy dura para el equipo, pero que ha empezado a mejorar gracias a la buena imagen mostrada en casa en los últimos choques.

Soler acumula tres goles en Liga con el Valencia, pero los dos anteriores llegaron a domicilio, en las visitas al Villarreal (0-2) y al Alavés (2-1), por lo que el de esta semana es el primero que logrado ante su gente.

Tras el encuentro ante el Celta, fue el foco de atención de los medios, mostró su satisfacción por el partido realizado y ofrecía junto a su compañero y también canterano Lato, otros de los triunfadores de la noche, una imagen de felicidad y alegría que en los últimos años no se respiraba con frecuencia en Mestalla.

"Es increíble que la gente cante tu nombre", admitió tras el encuentro, pero también recordó que no ha cambiado el objetivo de acabar la temporada "de la mejor manera posible" una vez se ha alejado el fantasma del descenso.

Carlos Soler ha crecido mucho en muy poco tiempo, ya que es importante para el equipo tras acumular tan solo quince partidos en Primera División, en los que ha vivido grandes momentos, pero también algunos sinsabores.

El primero de ellos fue en casa ante el Eibar, donde vio la roja directa por una fricción con Escalante en la primera mitad del choque que su equipo perdió por 0-4, en la que ha sido su última derrota en Mestalla hasta el momento.

El último se produjo tan solo ocho minutos antes del éxtasis de su gol ante el Celta. El árbitro castigó con pena máxima una acción entre Soler y Iago Aspas que puso el 2-2 en el marcador. "No ha sido penalti", afirmó tajante el jugador tras el encuentro.