Iker no se rinde. Su salida de los terrenos de juego de manera temporal le han llevado a probarse en otras tareas del club. En la presente temporada, el guardameta forma parte de las labores de la dirección deportiva del Oporto, a la espera de saber cuándo volverá a plantarse bajo una portería.
Según revela el diario portugués 'A Bola', el mostoleño será sometido a pruebas médicas en diciembre, que determinarán su futuro. En caso de ser favorables, el fútbol tendrá la suerte de volver a ver a Casillas parar de nuevo siete meses después de su infarto.
Sergio Conceiçao, su técnico en el cuadro portugués, confía en el regreso del portero español: "Iker es un campeón y los campeones nunca se rinden".
Los campeones no son de rendirse, ni tampoco de escuchar a aquellos que se lo proponen. Íker, que quiere irse con los guantes ensuciados, ya ha dejado claro que será él quien decida cuándo es el momento de retirarse.