Catar-EAU, una rivalidad que va más allá del fútbol

Para entender la situación de tensión diplomática que se vive en la actualidad en el Golfo Pérsico hay que remontarse unos pocos años, a los últimos meses de 1971, cuando ambos países obtuvieron su independencia del Reino Unido.

El Imperio Británico llevaba más de un siglo dominando con la fórmula del protectorado la zona, de mayoría musulmana suní, hasta que con el fin del colonialismo clásico en la zona emergieron estos nuevos países.

Los Emiratos Árabes Unidos y Catar son políticamente similares. Ambos son gobernados por un emir, aunque por las características propias de los EUA, su monarquía puede ser considerada como presidencialista, al estilo de las europeas, y no absoluta, como la de su vecino Catar.

Sin embargo, los problemas entre uno y otro surgen a raíz de la ruptura de relaciones diplomáticas de Arabia Saudí en 2017, la potencia regional, con Catar. La razón oficial fue la supuesta relación del emirato pérsico con algunos grupos terroristas.

Emiratos y Baréin, como miembros del Consejo de Cooperación del Golfo con Arabia, siguieron a la monarquía saudí y cortaron sus relaciones con Catar. El emirato catarí se había quedado prácticamente aislado en el Golfo Pérsico.

Pronto otros países se unieron a la iniciativa saudí, lo que provocó situaciones un tanto extrañas, como que Yemen, sumido en una guerra del todo asimétrica con Arabia, se posicionara del lado de su rival en este conflicto diplomático.

La retirada del Reino Unido de la región, hace 50 años, permitió que Arabia Saudí se convirtiera en el árbitro de las disputas entre los países de la zona, haciendo que llevar la contraria al régimen de Riad se convirtiera en una muy mala idea.

Aquel hecho, cuya naturaleza aún sigue siendo un tanto oscura y difícil de explicar, sigue coleando en la actualidad. La presencia de la Selección de Catar en la Copa de Asia, celebrada en los Emiratos Árabes, provocó algunas fricciones, pero no se llegó al extremo vivido en la Copa del Golfo de 2017, que se iba a haber celebrado en Catar, pero que terminó disputándose en Kuwait sin Arabia, EUA ni Baréin.

El fútbol ha querido que estos dos vecinos y rivales se vean las caras en las semifinales de la Copa de Asia 2019. Catar ha llegado contra pronóstico, tras pasar como primera en un grupo formado por Arabia, Líbano y Corea del Norte, y luego dejar en octavos a Irak y a Corea del Sur en cuartos.

Los Emiratos Árabes han llegado a semifinales también por la vía de los héroes, como primera de un grupo formado por Tailanda, Baréin e India, y luego venciendo con sufrimiento a Kirguizistán y a Australia, los vigentes campeones.

Japón ya espera en la final. Esperamos que en esta semifinal en la que se medirán Emiratos y Catar sólo se hable de fútbol.