Este miércoles, la bomba saltó cuando se publicó que Santi Mina había sancionado por la Audiencia provincial de Almería por un delito de abuso sexual a una mujer el 18 de junio de 2017 en Mojácar.
Tras esto, el Celta lo apartó del equipo y le abrió un expediente disciplinario. La sanción podría alcanzar los cuatro años de prisión y una indemnización de 50.000 euros. Pero todo no queda ahí.
El conjunto vigués borró al delantero de su página web y no se puede seleccionar entre todos los jugadores de la primera plantilla. Además, no se puede comprar su camiseta en las tiendas oficiales.
El jugador no volverá a jugar en lo que resta de campaña y los servicios jurídicos del club estudiaron la posibilidad de rescindir el contrato del futbolista, en vigencia hasta 2024, pero de momento, no se contempla esa opción.