El Rayo Majadahonda y la UD Las Palmas se enfrentaban este lunes con la intención de insuflar oxígeno a una temporada repleta de altibajos.
Ambos equipos llegaban sumidos en una larga mala racha de resultados. El conjunto anfitrión no ganaba desde el pasado 18 de noviembre y la Unión Deportiva no lo hacía desde el 20 de octubre, en el encuentro en casa ante el Numancia (3-0).
Sin embargo, la cita de este lunes no fue la apropiada para vencer y cortar esas dinámicas. Se sumaron la ineficacia de los isleños a domicilio y la mala experiencia de los locales en el Cerro del Espino, donde no han ganado ni un solo duelo esta temporada tras el traslado desde el Wanda Metropolitano.
El duelo comenzó con mucho equilibrio entre ambos combinados, pero la UD Las Palmas acabó comiéndose el terreno en la recta final del primer tiempo.
Aun así, poco tino en las porterías contrarias. Nulas fueron las ocasiones claras que se dieron en los primeros 45 minutos, pero menos se dieron aún tras la reanudación.
En la segunda mitad, el Rayo Majadahonda gozó de la posesión del balón, pero no supo aprovecharlo. De hecho, era el contrincante el que generaba las jugadas más peligrosas a la contra.
Al final, la balanza no se movió y el electrónico permaneció 0-0 hasta el pitido final. Se queda con un punto cada equipo, insuficiente, uno para alejarse de la zona de descenso y otro para escalar en la tabla.
La UD Las Palmas demostró una vez más que le cuesta arrancar el año. Y es que el equipo isleño solo ha ganado dos veces desde 2006 el primer partido oficial, de Liga o Copa del Rey, con el que estrena nuevo año. Fue en 2015 ante el Barcelona B (0-2) y en 2010 ante el Elche (2-5). El resto de sus primeros resultados oficiales, en los últimos 13 años, han sido siempre derrotas o empates.