6º portero más caro de la historia y feliz 'padrino' de un español

¿A quién no le agrada la tranquilidad? El fútbol comporta protagonismo y el protagonismo comporta titulares de prensa. Hay muchos casos de 'cracks' desencantados con el espacio bajo los focos que implican sus carreras. El mejor es el de Gareth Bale, que esquivó a los medios de comunicación españoles durante años antes de apartarse un poco, como deseaba. Es comprensible. El fenómeno de dar para tanta tinta ha salpicado a muchos y Jasper Cillessen, que tiene que jugar las semifinales del 'play off' por competiciones europeas de la Eredivisie este jueves, es uno de ellos.

El público ibérico le conoce por su pasado en el Barcelona y en el Valencia. Entre ambos 'stints', acarreó una operación de mercado de lo más curiosa. Su periplo en la Ciudad Condal estaba agotado para el verano de 2019, de modo que los despachos del Camp Nou amarraron una suerte de intercambio con los de Mestalla con Neto y 35 millones de euros de por medio, lo que hizo del ex del Ajax el 6º guardameta más caro de la historia.

En los registros de traspasos, está empatado con Thibaut Courtois -del Chelsea al Real Madrid por 35 'kilos'- y por detrás de Ederson Moraes -del Benfica al Manchester City por 40-, André Onana -del Inter de Milán al Manchester United por 52.5-, Gianluigi Buffon -del Parma a la Juventus por 52.88-, Alisson Becker -de la Roma al Liverpool por 62.5- y Kepa Arrizabalaga -del Athletic al Chelsea por 80-.

Gracias a su posición en el 'ranking', los aficionados tendrán motivos para recordar, cada cierto tiempo, aquella aventura a orillas del Turia que tanto dio de qué hablar. Nunca terminó, ni allí ni en Cataluña, de esgrimir el rol de titular para el que parecía que estaba preparado tras una campaña 2015-16 de absoluto protagonismo en Ámsterdam, donde compareció en el césped en 44 ocasiones con solo 33 goles encajados.

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Muchos años antes, eso sí, cuando tan solo contaba 20 o 21 primaveras, militaba en el Nijmegen, sede de sus primeros tonteos con la élite. Es allí adonde volvió después de su despedida del Valencia, que se resignó a su marcha por tan solo un millón de euros. Para el portero, ha sido la mejor decisión posible. Ya es un veterano y no le queda demasiada trayectoria por delante, pero no jugaba tanto desde su anterior paso por la Eredivisie.

En su primera campaña de vuelta, estuvo en 32 encuentros. En la actual, lleva los mismos, 32, así que se superará a sí mismo si está en las semifinales de los 'play offs' que Países Bajos celebra para elegir a sus representantes en competiciones europeas. En su tierra, el grado de veteranía que atesora le ha convertido en el 'padrino' de varios integrantes del vestuario. Uno, el único español, es Róber González, que milita allí cedido por el Real Betis.

El propio verdiblanco lo contó en una entrevista con esta app, BeSoccer: "Jasper me ayudó bastante, sobre todo los primeros meses, para poder comunicarme y ha sido una gran ayuda para mí aquí. A nivel de equipo, hay mucha calidad y compromiso con muchos jugadores jóvenes, pero también algunos más mayores con una gran trayectoria que nos enseñan cada día, pero, sobre todo, es un gran grupo humano".

Este grupo que dibujó con tanta claridad el otrora extremo de Las Palmas y Alavés tiene entre manos un potencial 'ticket' para Europa que redondearía la temporada del Nijmegen, finalista de la Copa nacional. Sus colores no se ven en el plano continental desde los dieciseisavos de la Europa League de la 2008-09, cuando perdieron por un global de 4-0 ante el Hamburgo. Para Cillessen, acompañar al escudo de su vida de vuelta a estas esferas sería el posible cierre perfecto: acaba contrato el año que viene y no salta la campo en estos torneos desde la vuelta de los octavos de final de la Champions en 2020, cuando encajó cuatro goles de la Atalanta. Y justamente la 'Dea' acaba de ser campeona acabando con la racha de 51 encuentros invicto del Bayer Leverkusen.