El holandés no está dispuesto a seguir en el club azulgrana si desde la directiva y el cuerpo técnico no le aseguran más protagonismo y eso es lo que estaría transmitiendo el propio jugador con su visita a la Ciudad Deportiva en pleno inicio del mes de junio.
Cillessen, de vacaciones desde hace unos días, no ha querido relajarse y disfrutar tras un año largo hasta no aclarar su futuro. El club quiere que siga, ya que tiene calidad suficiente para ser el segundo portero, pero él es ambicioso y quiere más.
Propuestas procedentes del Nápoles, y de Arsenal y Liverpool están interesados en hacerse con sus servicios. Además de tratarse en los tres casos de equipos de élite, todos ellos le asegurarían minutos y protagonismo al guardameta de 29 años.
Tal es la situación que el Barcelona ya ha apuntado cuatro nombres en su agenda para reforzarse en caso de que el holandés decida no continuar. Estos son los de Tim Krul, Rui Patrício, Joel Robles y Vicente Guaita.
No obstante, no parece que el club azulgrana esté muy por la labor de negociar, ya que, según 'Mundo Deportivo', el Barcelona exigirá el abono de la cláusula de rescisión (valorada en 60 millones) para dejarle ir.