Sí, está bastante complicado. El Atlético es experto en defender rentas y la que se llevará al choque de vuelta resulta bastante jugosa. Pero si hay un tipo capaz de obrar una épica como la que necesita la Juve, ese es Cristiano Ronaldo.
Hay que remontarse a abril de 2016 para hallar un precedente como el que necesitan los de Allegri si quieren llegar a los cuartos de final. El Wolfsburgo había sorprendido al Madrid en la ida con un partidazo que le dejó una buena renta. El 2-0, firmado por Ricardo Rodríguez y Arnold, era bueno, pero nunca definitivo cuando toca ir al Bernabéu.
De hecho, así ocurrió. El Madrid necesitaba una noche casi perfecta y a su goleador con más hambre que nunca. No falló el portugués, que firmó el triplete con el que su equipo obró la remontada. En los minutos 15, 17 y 77, tiró de catálogo para revertir el desastre de la ida.
Era su noche
Primero aprovechando un servicio de Carvajal al segundo palo y casi acto seguido cruzando muy bien de cabeza un córner desde el primer palo, en apenas un suspiro ya había igualado la eliminatoria.
Pero quedaba la guinda, que llegó cuando se empezaba a pensar en la prórroga. En una falta más apta para un zurdo, se la jugó a que la barrera se iba a abrir... y premio. La bola se coló por una rendija y Benaglio no llegó a tiempo.
Fue un Cristiano encendido, furioso, con el Bernabéu a sus pies. Una de sus noches magistrales en su adorada Champions. Y una así necesitará para la vuelta en Turín.
De hecho, la imagen con la que salió del Metropolitano no pudo estar más alejada de esa realidad. Pudo haber cambiado el sino con un trallazo de falta que Oblak abortó como pudo. Pero se marchó con un feísimo gesto presumiendo de champions ante los 'colchoneros'.
La estadística le avala, pero...
La estrella 'bianconera' no pudo marcar ni asistir, y es algo extraño habida cuenta de su trayectoria histórica en la competición. Desde 2009, en todos los partidos de octavos de final siempre marcó al menos un tanto o dio a sus compañeros una asistencia. Es decir, por estadística, le queda producir un tanto en el campo de la Juve el próximo 12 de marzo.
Es más, en estos diez años, en dicha ronda, únicamente se quedó sin marcar ante Olympique de Lyon y Nápoles, si bien al menos antte ellos pudo permitir a un compañero anotar.
Más datos a favor de Cristiano están en ese ciclo arrollador del Madrid, ganador de cuatro de las últimas cinco Champions en juego. De los 14 encuentros a domicilio disputados en ese tramo en choques de eliminatoria, en solo cinco se quedó sin anotar.
Eso sí, ahí el Atlético de Madrid puede tirar de músculo estadístico para reducirle, puesto que tres de esos cinco partidos se disputaron en el estadio rojiblanco.
De hecho, de todos los rivales que ha tenido Cristiano Ronaldo en los partidos a doble vuelta, el Atlético, con cuatro, ha sido el que más veces le ha dejado a cero, amén de la final de Milán.