Bélgica tiene un grave problema llamado fútbol. Roberto Martínez no ha sido capaz de dar con la tecla en los dos primeros partidos del Mundial y, en esta segunda jornada, Marruecos la ha ridiculizado hasta tal punto que no ha tenido opciones de ganar en ningún momento.
Golpe monumental de Marruecos al destino del Grupo F, que pasa a ser liderado por el equipo africano tras el batacazo de Bélgica a la espera del Croacia-Canadá. Y la selección europea, hundida tras otra muestra más de lo perdida que está tanto en juego como en intensidad.
Martínez introdujo a Onana, Meunier y Thorgan Hazard en el once de Bélgica. Novedades que no cambiaron nada en absoluto. El problema es de raíz. Los 'diablos rojos' no saben qué hacer con el balón cuando lo tienen... si es que lo tienen, que no fue este el caso.
El choque comenzó con una polémica: ¿qué pasó con Bono? ¿Por qué no fue titular? Salió Munir en su lugar, y eso que el portero del Sevilla calentó con los otros diez futbolistas marroquíes y saludó a los rivales belgas como mandan los cánones del fútbol. Al parecer, Bono se insistió indispuesto en el último instantes, justo antes de comenzar.
Nada mal para comenzar la actuación de Munir, que detuvo un remate de Batshuayi dentro del área, el que sí le entró ante Canadá. Pero poco más de Bélgica en ataque y desaparecido absolutamente en combate un Eden Hazard que no está para ser titular en ningún lado.
Ziyech avisó con un potente disparo que se fue desviado por poco y, a partir de la media hora, Marruecos dio un paso adelante en todos los sentidos para incomodar de manera notable al equipo de Roberto Martínez. En el 36', Hakimi pudo estrenar el marcador tras una cabalgada fabulosa por banda derecha.
Al filo del descanso, Ziyech marcó en una falta envenenada desde la banda derecha que Courtois no acertó a despejar por un futbolista de Marruecos que estaba en posición adelantada. Fuera de juego posicional evidente y gol, por tanto, anulado para un grupo de jugadores que ya se veían superiores a Bélgica.
En la segunda parte, Boufal rozó el 0-1 con un latigazo desde la izquierda que Courtois solo pudo acompañar con la mirada. Bélgica no daba señales de vida, ni De Bruyne, ni Hazard... Roberto Martínez movió el banquillo, pero la cosa fue a peor.
Minuto 73 y falta parecida a la del gol anulado, pero en el otro costado y esta vez lanzada por Sabiri, que buscó el primer palo de Courtois... y lo encontró. No estuvo acertado el portero del Real Madrid. No hizo falta que nadie tocara ese balón y el partido, con el 0-1, se convirtió en una fiesta para Marruecos.
Ni ante la necesidad fue capaz Bélgica de hacerse con el balón. Marruecos siguió dominando y contragolpeando hasta que, en el 92', Ziyech apareció por línea de fondo, dio el pase atrás y Aboukhlal fusiló a Courtois. El conjunto de Bob Martínez se mete en un lío en un Grupo F que está que arde...