Sampaoli ha cambiado la cara de este Sevilla, que ha mejorado notablemente con el cambio de entrenador. Ante el Athletic, ya demostró algo distinto, aunque el fuelle le duró poco. Este martes, en Dortmund, pudo ganar a todo un Borussia, pero se llevó un punto para, al menos, seguir aspirando a la plaza de Europa League.
El Sevilla está ahora a cinco puntos del Borussia, segundo clasificado tras el Manchester City. Solo quedan seis por disputarse. El objetivo de los octavos parece lejano, demasiado, pero Sampaoli ha logrado una mutación en el equipo hispalense importante para levantar un vuelo que parecía destinado al horror.
Hizo cambios importantes el argentino, como dar más profundidad a Jesús Navas y a Acuña en los laterales, más una defensa de tres centrales formada por Marcao, el goleador Nianzou y Carmona, que mejoraron las sensaciones de una plantilla que estaba cometiendo errores infantiles en este comienzo de temporada.
Los primeros 20 minutos fueron inmejorables. Una presión alta para incomodar al Borussia, Rakitic mandando en la sala de máquinas y Lamela amenazando por banda izquierda. El gol llegó en el 18', tras un envío impecable del croata que Nianzou mandó al fondo de las mallas con un cabezazo impecable.
A partir de ahí, el ritmo de juego bajó y el Borussia empezó a mandar con el balón, lo que obligó al Sevilla a hacer un esfuerzo físico para el que no estaba preparado. Adeyemi se aprovechó de un fallo de Marcao que solucionó Bono y, en el 35', Bellingham conectó un buen servicio de Meunier para el empate (1-1).
Ya en la segunda parte, el Sevilla se lo tomó con más calma para que el partido no se le fuera de las manos frente a la pólvora que el Borussia tiene en ataque. En el descanso, Raphaël Guerreiro entró al campo y cumplió su partido número 200 con el conjunto alemán.
En el minuto 67, la ocasión más clara para el Sevilla de toda la segunda parte: un remate forzado de Lamela solo en el área pequeña que detuvo Kobel en dos tiempos. No se lo podía creer el argentino, que pudo darle alas a los suyos para soñar por los octavos de la Champions.
Las tablas se fueron confirmando con el paso de los minutos y la falta de gasolina en ambos lados. Hummels gozó de una buena ocasión de cabeza, Meunier se fue lesionado y, entre algunas protestas y faltas en el medio del campo, el encuentro terminó con 1-1 en el Signal Iduna Park.