Un hilo fino que comienza a ceder

Un gol de Matheus Cunha, la expulsión de Lewis Cook, un error de Neto, un balón perdido por Billing y el 1-2 de Sasa Kalajdzic ya en el minuto 87 desembocaron este sábado en otra derrota de Andoni Iraola al frente del Bournemouth, la cuarta consecutiva de su equipo, remontado por el Wolves en el estadio Vitality (1-2), que pone aún más en riesgo su proyecto.
Sin victorias aún en la Premier, con tres puntos tan solo en nueve jornadas, hundido en el penúltimo puesto de la clasificación, la situación del técnico español es cada vez más comprometida en el banquillo del Bournemouth, que se adelantó en el marcador, pero tampoco le sirvió para nada, de repente en una autodestrucción imprevista hasta la derrota.
En el minuto 17, Solanke marcó un golazo de tacón, a pase de Billing, para poner al frente a su equipo frente al Wolves, que igualó en la primera acción del segundo tiempo por medio de Matheus Cunha, con un buen gol con la derecha.
Fue el principio del fin para el Bournemouth, porque Lewis Cook fue expulsado después, en el 54', por un leve golpe con la cabeza a Hee Chan, cuya caída al suelo hizo el resto para la tarjeta roja. Una imprudencia del jugador local, en cualquier caso.
Y porque ya en el 87, cuando el partido parecía destinado al empate, con su equipo en inferioridad numérica, a Neto se le ocurrió poner el balón en juego a toda velocidad, por el medio, hacia Biling, que fue presionado, perdió el balón... Y la jugada acabó en el 1-2 de Sasa Kalajdzic entre la desesperación de Iraola.