El año de sus vidas

Ganar el Mundial y presentar la candidatura a la Liga de las Naciones remontando un 1-3 a favor de Suecia. Con el paso del tiempo, las jugadoras de España recordarán 2023 como el año de sus vidas. Porque remar contra la corriente nunca es sencillo y 'la Roja' lo hizo fácil a raíz de los cambios de Montse Tomé en la 2ª mitad. El marcador hizo justicia en Málaga y, pese a las sombras, este es el camino a seguir.

El combinado que hizo historia en Australia y Nueva Zelanda goleó al conjunto escandinavo por 5-3 en el duelo final de la fase de grupos, cuya 'Final Four' se celebrará entre el 21 y el 28 de febrero de 2024. Méritos para los goles de Salma Paralluelo, Athenea del Castillo, Fiamma Benítez y el doblete de Mariona Caldentey. La gran protagonista por sus 2 zarpazos en el ejemplo perfecto de soplar y soplar hasta que el muro caiga.

Preocupación

Lo cierto es que las chicas de Montse Tomé no estuvieron a la altura de las circunstancias. O, al menos, en la percepción del descanso. Y la preocupación tardó menos de 60 segundos en entrar a escena. En el primer saque de esquina, la prolongación al 2º palo habilitó a Julia Zigiotti Olme para besar las mallas plácidamente. 0-1 en el marcador y la sensación de no aprender de los errores del pasado.

Pese a ello, Olga Carmona quiso sumar a la causa. La portadora del brazalete se topó con la cruceta antes de fabricar la acción del empate. Su centro fue sencillamente perfecto y Salma Paralluelo solo tuvo que cabecear cómodamente a la red. Tablas en el mejor momento posible, aunque Suecia volvió a imponer su ley en La Rosaleda.

El reflejo de lo que se ve

Kosovare Asllani demostró que el fútbol es el reflejo de lo que se ve. España no estaba cómoda en tareas defensivas y la capitana visitante se inventó una vaselina de matrícula y licenciatura para superar a Misa Rodríguez. El 1-2 fue el colmo y ya el 1-3 se convirtió en un jarro de agua congelada. Tere Abelleira no estuvo fina en la salida de balón, Johanna Rytting-Kaneryd le facilitó el trabajo a Stina Blackstenius y la '11' por excelencia hizo el resto.

El paso por los vestuarios tenía que suponer un golpe de reacción en 'la Roja'. De lo contrario, la hecatombe era cuestión de minutos. Montse Tomé dio entrada a Laia Codina en el intermedio en lugar de Ivana Andrés. Una sustitución más que necesaria puesto que la zaguera, si veía la amarilla, se perdía las semifinales de la Liga de las Naciones. Y la 'Operación Remontada' empezó de la mejor forma posible.

Rendidas a Athenea

La Rosaleda, Málaga y un pais entero. Las 3 partes mencionadas acabaron rendidas a Athenea del Castillo. Para variar, Olga Carmona plantó la semilla del gol con otra internada más desde el perfil zurdo. Esta vez, su pase de la muerte raso, potente y eficaz habilitó a su compañera en el Real Madrid. Definición de interior con la bota izquierda y para dentro. 2-3 y La Rosaleda celebró que no todo estaba sentenciado ni mucho menos.

A raíz de aquí, la lluvia de ideas precipitó sobre la Costa del Sol con las anfitrionas dominando a su rival. Mayor claridad en zona ofensiva y saber frenar cuando vas pasado de revoluciones. Salma Paralluelo volvió a coquetear con el tanto, pero Jennifer Falk se transformó en el muro de contención que estaba amargando la última heroicidad del año. Hasta que Aitana Bonmatí saltó al verde y se desató la locura.

Lo mejor siempre está por llegar

Como suelen decir las lenguas antiguas, lo mejor siempre está por llegar. Mariona Caldentey y Fiamma Benítez. Fiamma Benítez y Mariona Caldentey. La atacante del Barcelona tuvo el detalle de limpiar el polvo de la escuadra con el 3-3. Segundos después, la referencia del Valencia se plantó en un mano a mano y concluyó con una sutil vaselina. El gesto del 4-3 se transformó en la vía por la que la '8' le puso la guinda al pastel. 5-3 y fiesta completa en Málaga con récord de asistencia incluido.

En definitiva, las heroínas de España cerraron el año de sus vidas con una remontada de película sobre Suecia. 2024 estará marcado por la 'Final Four' de la Liga de las Naciones y los Juegos Olímpicos de París. La 1ª cruz de la lista ya está tachada y solo queda rematarla. En el caso de que se confirme el billete al gran partido de la competición, la recompensa tendrá un sabor francés más que apetecible.