Nada que salvar

El tiempo apremia a Espanyol y Valencia. El cuadro 'perico' y el conjunto 'che' ven cómo siguen pasando las jornadas y no son capaces de transformar los partidos en victorias. Ya estamos prácticamente en la recta final de la primera vuelta y ambos dejaron escapar este miércoles un buen botín de puntos para intentar salir del túnel que lleva directo a Segunda.
Javi Puado marcó el camino hacia la luz para los locales, pero Diego López estableció una igualada que no contenta a nadie. El equipo de Manolo González, con un palo y un gol anulado, se mantiene en la antepenúltima posición, mientras que los de Rubén Baraja, con dos goles anulados y también con un palo, continúan anclados en el pozo de la clasificación.
Espanyol y Valencia, ambos en zona de descenso, fueron conscientes desde el minuto 1 de lo que se estaban jugando. Los dos se mostraron muy timoratos en los primeros instantes del encuentro, sin cometer ningún tipo de error que pudiera condicionarles el partido. Pese a ello, el cuadro 'che' se hizo con la posesión, aunque le sirvió de muy poco porque no era capaz de aprovecharla para generar un peligro real a su rival.
De hecho, el cuadro 'perico', al que poco le importó estar resguardado en su campo, fue el que le metió el miedo en el cuerpo a los de Rubén Baraja. Primero, en un disparo de Puado que escupió la madera. El capitán, lejos de lamentarse, lo volvió a intentar poco después, pero no remató como le hubiera gustado.
El equipo de Manolo González estaba rozando el gol. Solo le faltaba dar el golpe de gracia. Un golpe que casi da antes el Valencia de no ser también por el poste. Balón con música de Fran Pérez al segundo palo y Diego López, que le ganó la espalda a El Hilali, entró como un cohete y se sacó un disparo que fue directo al poste.
Pese al susto, el Espanyol reaccionó rápido y lo hizo para adelantarse en el marcador. El encargado de poner patas arriba a la grada fue Puado, que previamente al 1-0 llegó a desesperar a todos por perdonar otra ocasión. En cuestión de 3 minutos pasó de lamentarse por errar un mano a mano ante Dimitrievski a celebrar, en su cuarto intento, un testarazo cruzado de gol.
Tras la reanudación, el Valencia, al que le cuesta un mundo anotar, cambió su cara por completo y tardó un minuto de reloj en calmar al valencianismo. Diego López -no podía ser otro-, volvió a entrar a escena por el segundo palo a un centro de Barrenechea y esta vez batió a Joan García con un chut pegadito al palo derecho.
El cuadro 'che' había hecho lo más difícil y casi lo tira por la borda en una mala acción defensiva. Cheddira recibió un gran balón al espacio y cayó en el área ante la salida de Dimitrievski. La jugada continuó y Jofre mandó el cuero al fondo de la red. Sin embargo, González Fuertes lo invalidó porque había fuera de juego previo del delantero marroquí.
A partir de ese momento, el Espanyol prefirió dar otro paso atrás y el Valencia, pese a estar contra la espada y la pared en la clasificación, lo dio hacia delante para intentar llevarse una victoria más que clave para sus aspiraciones de salvación. Rubén Baraja empezó a mover ficha para agitar el avispero y aprovechar esas dudas de su oponente.
Y el plan que tenía en mente casi le salió de no ser porque le anularon dos goles en la recta final. El primero fue a Diego López, el 'MVP' del partido, que definió como un '9' tras recibir un pase con mucha clase de Sergi Canós con el exterior. Y el segundo fue de Dani Gómez, que aprovechó que al portero se le escurrió el esférico para marcar. También estaba en posición antirreglamentaria.
Al final, el Valencia tuvo que conformarse con un empate que le sabe a muy poco al igual que a un Espanyol que estaba siendo fiable en casa. No hay nada que salvar porque los 'pericos' y los 'chés' siguen empeñados en complicarse la vida y dejar todo para el último momento. El drama continúa y cada vez queda menos margen de maniobra.