En un partido clave, la Fiorentina alargó su mala racha en la Serie A, competición en la que acumula ya 5 jornadas seguidas sin ganar. Ni en marzo ni en abril, los de Vincenzo Italiano han conseguido un triunfo, lo que, unido al empate de este lunes, les aleja de los puestos europeos.
Todavía con un partido menos, el que tiene aplazado contra la Atalanta (enfrentamiento directo), las opciones de jugar Conference League o Europa League la próxima campaña pasan también por ganar la propia Conference o la Coppa Italia, de la que es semifinalista.
Porque el empate ante un Genoa sin nada en juego dejó a los locales décimos, a 6 puntos del objetivo. Y eso que empezaron bien el duelo, con un dominio generalizado que desembocó en un tanto de Andrea Belloti que fue anulado desde el VAR por fuera de juego.
Despertó el cuadro visitante y le dio la vuelta a la situación al ocaso del primer acto con un penalti que transformó el islandés Albert Gudmundsson, de los mejores jugadores del campeonato italiano. No tiró la toalla la Fiore y, al poco de comenzar el segundo acto, empató el duelo con un testarazo del francés Jonathan Ikoné.
El Genoa rozó el segundo poco después con un penalti que señaló el colegiado sobre Mateo Retegui pero que, de nuevo tras intervención del VAR, quedó anulado ante la protesta de los jugadores genoveses, incrédulos ante la decisión del árbitro.
El empate deja a la Fiorentina 10ª con 44 puntos, a 6 de una Atalanta que ocupa puestos europeos y con el que todavía tiene que jugar un partido aplazado. El equipo visitante, por su parte, virtualmente salvado y asentado en la zona media, se queda 12º con 39 puntos.