Filip Kostic se convirtió en el héroe y protagonista del Derby d'Italia. Porque fue el centrocampista serbio el encargado de anotar el tanto de la victoria por 0-1 de la Juventus de Turín ante el Inter de Milán, una solitaria diana que subió al marcador en el minuto 23 de partido.
Y lo hizo, cómo no, con polémica. Hasta cuatro minutos tardó el VAR en revisar la jugada y confirmar el tanto de los 'bianconeri', ya que en la repetición parecía que el balón se estrellaba en el brazo de Rabiot justo antes de asistir a su compañero. Pero desde la sala VOR se decidió que no había nada sancionable y el 0-1 subió al marcador.
Un resultado con el que terminaría finalizando el encuentro, un partido en el que el colegiado Daniele Chiffi tuvo mucho, muchísimo, trabajo. Hasta siete cartulinas amarillas y dos tarjetas rojas llegó a mostrar el árbitro durante el esperado derbi de Italia, que se caldeó más de lo esperado tras el pitido final del partido, con D'Ambrosio y Leandro Paredes expulsados.
En términos puramente futbolísticos, lo cierto es que este esperado duelo entre el Inter y la Juve apenas dejó espectáculo sobre el verde. La falta de ocasiones, sobre todo por parte de los de Inzaghi, provocó que el mediático choque se tornara en pesado y aburrido durante buena parte del encuentro, sobre todo en la segunda mitad.
Tras el ecuador, la grisácea tonalidad del partido acabó por desesperar a más de uno en las gradas del estadio Giuseppe Meazza, al ver cómo el conjunto de Massimiliano Allegri, sin apenas generar ocasiones, terminaba por sumar una sosa victoria ante un Inter completamente desaparecido.
Con este resultado, los 'nerazzurri' caen hasta la tercera plaza de la Serie A con 50 puntos -un par por encima del Milan, cuarto-, superados por una Lazio que se impuso por la mínima a la Roma para sumar 52 puntos. La Juve, por su parte, suma 41 unidades desde la séptima posición de la clasificación nacional italiana, a solo cuatro del Atalanta, equipo que tiene en sus manos la última plaza europea.