Sin gol es muy complicado ganar partidos. Y esto es lo que le pasó al Real Sporting en El Sardinero en su encuentro contra el Racing de Santander. Los cántabros no precisaron de mucho esfuerzo para llegar al área rival y, así, optar de ocasiones para marcar.
Mboula hizo el primero a los 12 minutos de encuentro y Matheus Aiás puso tierra de por medio en el 24' con un toque. El Pitu Abelardo hizo dos cambios a la media hora y otros dos al comenzar el segundo tiempo, donde el marcador no se movió.
Superioridad racinguista
La primera parte estuvo protagonizada por superioridad de los locales, quienes se hicieron con el dominio del esférico casi en su totalidad. Las ocasiones de gol no tardaron en llegar, así como los tantos.
Antes de que se estrenase el marcador, el único susto en zaga santanderina. Una mala salida de balón por parte del cuadro cántabro estuvo a punto de costarle un disgusto a los de José Alberto López. De rebote, Milovanovic estuvo a punto de marcar casi sin querer.
Luego, el 'Pichu' Cuéllar sacó un mano a mano de Matheus Aiás, que se plantó frente al portero del equipo de Gijón, pero este se hizo grande y solventó con gran maestría la acción de peligro.
En el 12', Mboula materializó el primer tanto del duelo. El delantero recibió de espaldas en el costado diestro y, con gran maestría, se dio media vuelta para encarar al defensor. Se deshizo de él con un cambio de ritmo y, tras un primer disparo que rechazó el arquero, aprovechó la segunda oportunidad para poner el 1-0.
El Real Sporting apenas gozó de ocasiones para recortar distancias y el Racing fue de menos a más en el transcurso de los primeros 45 minutos. El segundo tanto llegó en el 24'. Pase en largo de Dani Fernández hacia Matheus, que, con un solo toque, la coló por el palo corto del guardameta.
La 'falta' de reacción en el Real Sporting
Tras cumplirse la primera media hora de partido, el Pitu Abelardo tomó la decisión de realizar un doble cambio. El mister del cuadro de Gijón sacó del campo a Bruno y a Pedro Díaz e introdujo a Cristo González y a Christian Rivera.
Pero las oportunidades de los locales llegaron a mansalva. Antes de marcharse al descanso, el Racing estampó el esférico contra el larguero. De esta manera, se fue al descanso con una renta de dos goles a cero para cerrar el partido.
Una segunda parte diferente
Los segundos 45 minutos fueron muy diferentes a los primeros. Si bien el Racing seguía mandando en el juego, el Real Sporting metió una marcha más con el objetivo de reengancharse al ritmo impuesto por los locales.
Poco le hizo falta al conjunto cántabro para llegar a territorio rival. Así pues, el marcador no se movió a pesar de la multitud de oportunidades de las que gozó el equipo local para sentenciar el duelo.
Con el ingreso de Jony al terreno de juego, los de Abelardo se acercaron más a la portería de Miquel Parera, pero este parecía tener su noche. El guardameta las paró todas e incluso se ayudó del poste.
Este resultado deja al Racing fuera de los puestos de descenso, con los mismos puntos que la Ponferradina. En cambio, el Real Sporting se complicó la vida y se acerca a estos, a tan solo tres.