El Villarreal de Pacheta no termina de despegar. El conjunto castellonense volvió a dejarse dos puntos por el camino, esta vez en casa ante el Alavés, y la mala racha continúa por 5ª jornada consecutiva, lo que deja al 'submarino amarillo' anclado en la parte baja de la tabla clasificatoria.
Por su parte, los 'babazorros' también siguen alargando su mal momento -llevan seis partidos sin ganar- y eso que coquetearon con el triunfo en más de una ocasión. Samu Omorodion fue el que más peligro generó y el encargado de adelantar a los vitorianos, pero los locales se rehicieron con un penalti que transformó Gerard Moreno, que volvió a la titularidad en su partido 250 con su club.
Los de Pacheta intentaron obrar la remontada y se quedaron a medias al igual que su oponente. Jörgensen tuvo que emplearse a fondo en una enésima acción de Samu entre los centrales para evitar lo que a buen seguro hubiese sido el gol de la derrota amarilla.
El Alavés incomoda
Lo más normal era que el Villarreal tomase el mando desde el inicio ante el Alavés por jugar ante su público, pero los vitorianos incomodaron y mucho a los castellonenses. Pacheta había introducido una modificación en su sistema al dar entrada al 3-5-2, con Kiko Femenía y Pedraza como carrilleros, y se notó que había poca circulación. De hecho, el 'submarino amarillo' no disparó entre los tres palos en los primeros 45 minutos.
Gerard Moreno estaba apagado o fuera de cobertura y justo en un día en el que llegó a 250 partidos con la elástica 'grogueta'. Sorloth también estaba en el mismo plan y eso generó más problemas a los locales. Por su parte, los vitorianos estuvieron muy firmes tanto en defensa como en la medular, al igual que el ataque.
Samu Omorodion fue un auténtico dolor de muelas para la defensa del Villarreal. Jorge Cuenca, Mandi y Albiol se las vieron y desearon para poder quitarle la pelota al internacional español. De hecho, el ex del Granada tuvo el gol en sus botas en dos acciones: la primera fue en un disparo al muñeco en las narices de Jörgensen y la segunda, en un gol anulado tras una falta previa a Jorge Cuenca.
Estaba acechando el área rival el Alavés, que volvió a quedarse con la miel en los labios muy cerca ya del descanso. Jörgensen tuvo que emplearse de nuevo a fondo con un pie milagroso a disparo de Luis Rioja, que le cayó la pelota franca tras varios rebotes.
Los dos, a medias
Tras la reanudación, el Alavés sabía que no podía volver a dejar escapar una oportunidad y Samu Omorodion se puso las pilas. No pasaron ni 3 minutos cuando el gigantón, tras un gran pase con el exterior de Guridi, se plantó solo ante el cancerbero y definió por bajo para hacer el 0-1.
Éxtasis en el banquillo 'babazorro' y no era para menos porque el equipo lo estaba mereciendo. El Villarreal se llevó una dura 'hostia', pero consiguió rehacerse a base de buen juego y llegadas de peligro en el área contraria. Y así fue como en el 65', a raíz de una mano en el área de Sedlar ante Gerard Moreno, el propio delantero del conjunto castellonense tomó la responsabilidad y puso la pelota en la cepa del poste izquierdo.
A partir de ese momento, los locales trataron de ir con todo a por la remontada y finalmente se quedaron por el camino. También el Alavés, ya que Samu Omorodion, que dio a la tecla de explosión, se marchó con suma facilidad de Albiol y vio cómo Jörgensen metió una gran mano abajo para evitar el 1-2.
Poco después, Gorosabel casi firmó el gol de la temporada en una posición muy escorada en la derecha. De nuevo estuvo muy atento el portero del Villarreal. Ya en los últimos instantes, Sorloth ejecutó un remate picado que escupió la madera. Reparto de puntos en La Cerámica entre dos equipos que siguen sumidos en sus respectivas malas rachas, siendo la del 'submarino amarillo' muy preocupante porque debería estar peleando por Europa. Sigue dando tumbos y eso complica sus objetivos.