A falta de dos jornadas para el final -tres para Huila-, el cuadro entrenado por Dayron Alexander Pérez Calle logró el objetivo de la temporada que no era otro que evitar bajar de categoría.
La salvación se certificó el viernes cuando Boyacá Chicó, equipo con el que luchaba para no descender, empató a uno contra Deportivo Pasto, que no se jugaba nada.
Ahora, Huila podrá jugar sin presión ante Envigado, un equipo que anda en tierra de nadie pero que querrá acabar el campeonato de la mejor forma posible.