El Everton lleva tiempo planeando mudarse de Goodison Park a un flamante y moderno nuevo estadio, y el Ayuntamiento de Liverpool ha dado luz verde al proyecto. La mudanza costará unos 500 millones de libras a los 'toffees'.
El nuevo estadio del Everton, el cual únicamente existe en recreaciones virtuales, se prevé que tenga capacidad para 52.000 espectadores, y que esté listo para 2023.
El proyecto ha sido polémico desde que fuese desvelado tiempo atrás. Porque el Everton pretende que su estadio se levante en la zona portuaria, a orillas del río Mersey, en el muelle Bramley-Moore, una zona histórica de la ciudad de Liverpool.
El Gobierno británico, tras la aprobación por parte del consistorio liverpuliano, dispone de 28 días para ratificarla, al ser una zona de especial relevancia histórica y monumental (aunque sea una zona portuaria-industrial).
February 23, 2021
En cuanto sea ratificado, el proyecto tendrá por fin luz verde para dar comienzo. Y cuando el Everton se mude a su nuevo estadio en 2023, Goodison Park, un estadio que entonces tendrá 131 años, será demolido para dar paso a nuevas viviendas, un hospital y una nueva zona comercial.
'The Grand Old Lady' está, por tanto, en sus últimos años de existencia. Un estadio que se inauguró con un partido amistoso entre el Everton y el Bolton Wanderers, el 2 de septiembre de 1892, el cual ganaron los 'toffees', luciendo sus colores originales (camiseta de color salmón con rayas azul oscuro), por 4-2.
February 23, 2021
El récord de asistencia fue en un derbi de Merseyside, como era de esperar, disputado el 18 de septiembre 1948, en una Inglaterra de posguerra en plena recuperación, que encontró en el fútbol una vía de escape para huir de la miseria cotidiana.
78,299 espectadores acudieron a aquel duelo, disputado en la entonces conocida como Division One. Hoy en día el aforo está limitado por obvias cuestiones de seguridad, y caben 39,414 aficionados en las gradas del vetusto Goodison Park.