Hay ciertos requisitos, evidentemente, para que una persona reciba dinero de la Administración pública de su país. Una manera de eludirlos es llevar a cabo la transacción a través de una ONG, de manera que el Gobierno se entiende con la ONG y la ONG, con el receptor. Si esto ocurre sin irregularidades, no hay ningún problema, pero Dani Alves ha sido protagonista de un movimiento sospechoso en sus cuentas.
Según 'Globo Esporte', está siendo investigado por el Ministerio Públido Federal de Brasil porque existe la posibilidad de que ingresara unos 1,3 millones de euros a través de una organización inactiva. Al estar esta inactiva a través de los registros oficiales, se desactivaría el mecanismo a través del que el futbolista podía recibir fondos públicos, de modo que la circulación del dinero pasaría a ser ilegal.
Las pesquisas están tratando de arrojar luz sobre si esto ocurrió, si ocurrió adrede y si ocurrió con el objetivo de evitar los requisitos necesarios para ser beneficiario de fondos públicos. Si todo esto se confirma, el escenario será el peor posible para el ex del Barcelona, que tendrá que afrontar meses de juicios, comparecencias ante la Justicia y posibles pagos de multas importantes.
Mientras esta polémica avanza, Dani Alves está centrado en disputar el Mundial de Catar con la Selección Brasileña. De hecho, ha estado preparándose para el campeonato en las instalaciones del Barcelona, pues la temporada de su equipo, Pumas, ya terminó. Joan Laporta, presidente azulgrana, le dio la bienvenida con las puertas abiertas para que depurara su físico antes de unirse a la 'Canarinha'.