Cuando ambos equipos, con empate a cero en el marcador, parecían estar pensando ya en el descanso, una falta desde el costado derecho de Cruzeiro protagonizó el mayor peligro del conjunto brasileño en toda la primera mitad.
La defensa de Boca falló en los marcajes y el esférico, después de varios rebotes, le cayó a Barcos, que consiguió armar rápido la pierna en el punto de penalti para enviar el balón al fondo de las mallas.
Cuando jugadores y afición ya estaban celebrando el tanto, el árbitro señaló una infracción anterior de Dedé a Rossi. El defensor brasileño fue con la pierna muy arriba y el colegiado apreció juego peligroso en su acción. El central ya protagonizó la polémica en el encuentro de ida en La Bombonera.
5 de octubre de 2018