La debilidad económica de LaLiga: sin recursos para competir en el mercado

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Desde la llegada de Javier Tebas a la presidencia de LaLiga, sus caballos de batalla han sido la lucha contra la piratería y el control económico de los clubes. Para esto último, sus medidas estrella fueron la implementación del límite salarial y la modificación del reparto de los ingresos por derechos televisivos en busca de hacerlo algo más equitativo, introduciendo factores del modelo inglés como los porcentajes en función de los resultados deportivos y el calado social del club. Para la Premier League, los acuerdos con 'Sky' o 'BT Sport' así como las emisoras internacionales han sido clave para construir un mercado propio, una burbuja a prueba de crisis que permite hacer grandes inversiones incluso a clubes de menor envergadura. Solo en la temporada 2020-21, el campeonato anunció que había dotado de más de dos mil millones y medio de libras a los 20 equipos de la categoría en su conjunto.
La difusión del fútbol a través de los distintos canales es el modelo de negocio principal. Sin afición, en el estadio o en casa, este deporte es insostenible. Pero para llegar a las cantidades del fútbol inglés se deben dar muchos condicionantes organizativos y sociales que en España no existen. Actualmente resulta utópico. Es muy difícil que las televisiones en abierto alcancen los ceros que manejan en el cable británico, mientras que la televisión de pago en nuestro país no tiene el mismo arraigo ni las mismas audiencias. Un cóctel que abrió el debate sobre el futuro económico de LaLiga y al que se acogieron quienes abrazaron la idea de la Superliga.
El fondo de este análisis es que el fútbol español necesita un electroshock monetario. El análisis del último lustro deja ver cómo LaLiga ha pasado de ser la segunda o la tercera que más invertía en fichajes a ser la última en esta campaña 2021-22. La crisis derivada de la pandemia del COVID-19 ha sido el mazazo definitivo a una deriva que ya existía años atrás, pero que en términos absolutos era tapada principalmente por los multimillonarios fichajes de FC Barcelona (Ousmane Dembélé y Philippe Coutinho entran en la muestra), Atlético y Real Madrid. Si buscamos las 10 operaciones más caras de cada una de las últimas cinco campañas, encontramos predominancia 'culé' con 14, seguido de las 11 rojiblancas (Lemar fue el más costoso de la 18-19) y otras 11 ‘merengues’ (Theo Hernández, Ceballos, Vinicius, Jovic…). Y en total solo aparecen siete clubes distintos. Tras la mencionada terna, Sevilla (5), Villarreal (4), Athletic Club (3) y Valencia (2). La aparición de los 'ches' es el espejismo de Guedes y Cillessen, mientras que los hispalenses y los amarillos son los únicos que compiten con los tres gigantes, aunque visiblemente más saneados que Barça y Atleti.
Todo esto implica que es la zona media y baja la que más ha acusado la crisis, ya que estos 10 fichajes más caros de cada temporada representaron el 49.71% del total de todo lo invertido en este lustro. Los números dicen que entre el curso 19-20 y el 20-21, primero en pandemia, descendió un 72.35% la inversión; de 1.524 'kilos' a 421.5. Y de la anterior a esta, del 14.74%, ya que hasta el 18 de enero se habían gastado 359.4 millones, con Ferran Torres (55) del City al Barça como el fichaje más caro. En estos dos años, solo en España hubo cinco clubes que cerraron el mercado sin soltar un euro, mientras que en el resto de Europa hubo seis (Bochum, Hoffenheim, Metz, Angers, Clermont, Girondins).
Uno de los elogios más repetidos hacia el modelo inglés es que dentro de lo generoso de su reparto televisivo, las diferencias entre el primero y el último no son tan pronunciadas. En la Premier League 2020-21, el Manchester City fue el que más cobró con un monto que rondó los 152 millones libras, mientras que el último fue el Sheffield United con 97 millones, un margen de 55. Ya no es solo que en España habría sido el tercero que más cobrase (el Atlético recibió 130.1 y el Sevilla 84.2), sino que en LaLiga, la diferencia del primero (FC Barcelona) y el último (SD Huesca) fue de 118.2: 165.6 'kilos' frente a 46.8. Una brecha que favorece la desigualdad presupuestaria de LaLiga, la cual observamos desde el punto de vista de los equipos recién ascendidos de las grandes ligas. ¿Cuánto han sido capaces de invertir en el último lustro?
De los cinco campeonatos, el español ocupa el tercer lugar con un total de 136.45 millones de euros. Más que la Ligue 1 (118.83) y la Bundesliga (110.5), esta con un club menos para la cuenta según se diera el 'play off', mientras que la Serie A se encuentra por encima (185.98). En una burbuja, cerca del millar más, la Premier League con 1.011.46 millones. Inglaterra ha construido un mercado propio que no solo absorbe el talento de fuera, sino que ha inflado el precio de sus propios jugadores ante la fortaleza económica de todo el conjunto. El Fulham empleó 116.5 millones en refuerzos en la temporada 2018-19, más que los recién ascendidos de Alemania en un lustro, y descendió de nuevo al Championship esa misma temporada. Por su parte, el Aston Villa invirtió en fichajes 159.5 en la 2019-20, más que los germanos y los franceses en conjunto.
En el año a año, España mantuvo una media muy parecida desde 2017 hasta enero de 2020, siempre alrededor de los 32 millones de euros. Una cifra constantemente por debajo de Italia, pero en competición directa con la Bundesliga. En la 17-18, por ejemplo, Stuttgart y Hannover 96 emplearon 49.9 millones de euros entre los dos. Tras estallar la pandemia, el gasto de los tres procedentes de LaLiga SmartBank se moderó hasta los 20.1 millones (20-21) y los 19.8 (21-22). Los germanos, por su parte, bajaron a los 15.45 y este curso apenas el Greuther Fürth ha pagado 1.3, pero su balance es favorable con 3.55 de ingresos. Mientras, quienes han mejorado cifras han sido los equipos de la Ligue 1: 45.5 entre Lorient y Lens hace dos temporadas (más que españoles y alemanes juntos), 20.8 el Troyes en esta.
Realmente, en todas las grandes ligas europeas ha descendido la inversión, aunque en algunas con más fuerza que en otras. Para Italia también fue un 'shock' y se pasó de gastar 47.54 ‘kilos’ entre los recién ascendidos en la 2019-20 a menos de la mitad, 21.62, en la 2020-21. Sin embargo, ha sido el único campeonato donde han repuntado los números respecto al año anterior. El ambicioso proyecto del Venezia ha tenido mucho que ver, de 34.69 millones 21.59 son suyos, lo que contrasta con los 9.8 del Empoli (que además ha vendido por 25.9) y los 3.3 de la Salernitana. Hasta en la Premier parece que se han 'moderado': 136.25 entre Norwich (64.05), Brentford (36.7) y Watford (35.5), la cifra más baja de las últimas cinco temporadas.
Un buen ejemplo de la desigualdad que citamos en el anterior apartado está en que, mientras los recién ascendidos de la Serie A han sido los segundos más pudientes en los últimos años, LaLiga Santander ha sido la segunda que más operaciones ha protagonizado de los 25 fichajes más caros desde la temporada 2017-18, tanto en origen como en destino. Empezando por el más importante de la historia del fútbol, el de Neymar Jr al Paris Saint-Germain en el verano de 2017 por su cláusula de 222 millones de euros.
Con aquel movimiento, el PSG también desató que el FC Barcelona soltara la chequera para firmar a Ousmane Dembélé desde el Borussia Dortmund y para fichar a Philippe Coutinho desde el Liverpool; ambas operaciones, cifradas contando objetivos cumplidos en 135 millones de euros. Son el tercer y cuarto fichaje más caro, por detrás de los 145 que los parisinos también desembolsaron para llevarse a Kylian Mbappé del Mónaco. Y para cerrar el 'top 5', Joao Félix, un fichaje del Atlético por 127 'kilos' como consecuencia de que el Barça se llevara a Antoine Griezmann a cambio de 120, el sexto de la lista. Un efecto dominó que al final no ha salido rentable en el Camp Nou.
Manchester City, Chelsea y Manchester United han sido grandes agitadores del mercado. Jack Grealish entró en el séptimo puesto con los 117.5 millones que pagaron los 'citizens' al Aston Villa, mientras Romelu Lukaku saltó al octavo con 115. Por cierto, el belga tiene el privilegio de estar tres veces en esta lista. En 2017 llegaba a Old Trafford por 84.7 y en 2019, al Inter por 74. Por cierto, su último aterrizaje en Stamford Bridge costó lo mismo que el de Eden Hazard en el Santiago Bernabéu. La suya es la última en valor de las nueve incorporaciones que estuvieron por encima del centenar.
Por debajo, Harry Maguire, el defensa más caro de la historia (87 millones), los líderes del gran Ajax Frenkie de Jong (86) y Matthijs de Ligt (85.5) o Jadon Sancho (85). Virgil van Dijk acabó justificando el precio de su traspaso desde el Southampton hasta el Liverpool, 84.65 millones de euros. Con 80 encontramos un grupo curioso: Kai Havertz y Kepa Arrizabalaga, ambos del Chelsea, el clausulazo de Lucas Hernández al Bayern de Múnich y un Nicolas Pépé que en el Arsenal no ha logrado explotar todo lo que apuntaba a ser en el Lille.
La salida de Arthur a la Juventus y la de Thomas Lemar al Atlético supusieron sendos desembolsos de 72 millones, aunque los 'bianconeri' rebajaron la operación enviando rumbo a Barcelona a Miralem Pjanic. El Nápoles también fue a lo grande con Victor Osimhen, al que reclutó del Lille por 71 'kilos'. El Manchester City es quien cierra este 'top 25' con dos operaciones que han sido determinantes. El verano pasado pagaba 68 millones de euros al Benfica para fichar a Rúben Dias, quien fue elegido ese mismo curso mejor defensa de la Premier y ayudó a corregir uno de los grandes problemas del equipo de Pep Guardiola. Por 67.8 incorporó en 2018 desde el Leicester a Riyad Mahrez, un jugador que también ha sido clave en los esquemas del de Santpedor.
Vistos los nombres y las cifras, nos detenemos a analizar orígenes y destinos. Decíamos que LaLiga había sido la segunda mayor protagonista porque, de estos 25 movimientos, el 20% tuvieron origen de España, donde se ingresaron 570 millones de euros a razón de Neymar, Griezmann (aunque fue dentro de nuestra frontera), Lucas Hernández, Kepa y Arthur. Por el otro lado, el 28% de los grandes fichajes aterrizaron en nuestro país con un coste de 790.2: Dembélé, Coutinho, Joao Félix, Griezmann, Hazard, De Jong y Lemar.
Por encima, la Premier ocupó el 32% del espectro de ventas (765.65 millones) y el 44% de los fichajes (949.65), casi la mayoría absoluta. Y como curiosidad, la Serie A aparece como una Liga de carácter comprador. Representa el 16% de los fichajes más caros por los 302.75 millones que movieron Inter (Lukaku), Juventus (De Ligt) y Nápoles (Arthur y Osimhen), mientras que a nivel de ventas no solo es la última de las cinco grandes ligas, sino que también está por debajo de Portugal y Países Bajos.
De la Eredivisie salieron Matthijs de Ligt y Frenkie de Jong, mientras que de la Primeira Liga lo hicieron Joao Félix y Rúben Dias. En la Serie A, el Inter se gastó el dinero en Romelu Lukaku para luego recibir una auténtica millonada del Chelsea en un momento financiero complicado que hizo marcharse a Antonio Conte. Se quedan muy al margen de todo, con asterisco, tanto la Bundesliga como la Ligue 1. En movimientos de entrada, el Bayern de Múnich solo hizo saltar la banca en estos últimos cinco años con Lucas Hernández, mientras que Dembélé, Havertz y Sancho fueron las única ventas gigantescas al resto de Europa. Respecto a Francia, su aparición destaca, pero en el aspecto comprador se ciñe al Paris Saint-Germain y los 'talonariazos' por Neymar y Mbappé. Mientras, se convierte en el tercer mercado más vendedor con el propio ex del Mónaco, Pépé, Lemar y Victor Osimhen.
Es interesante comprobar cómo se relacionan entre sí las cinco grandes ligas a la hora de fichar. En las esferas que acompañan a este texto se reflejan los lazos de movimientos de un campeonato a otro, el volumen de estos y el grueso que ocupa cada uno en este mercado exterior. En el balance de los cinco años (primera figura), se ve rápidamente que donde más se mueve a nivel global es la Premier League. Allí se han dado un total de 515 operaciones desde o hacia los otros principales torneos europeos, lo que supone el 26.01% del total de 1.980 registrados a 18 de enero de 2022, fecha de la extracción de los datos de este informe. La número dos es LaLiga (413, 20.85%), seguida de Ligue 1 (398, 20.1%), Serie A (390, 19.69%) y Bundesliga (13.33%).
Al distinguir entre destino y origen, España es el país que más ha comprado (224 fichajes) y por contra, el tercero que más ha vendido (189). Importa muchísimo talento extranjero, mientras que la Premier empata con la Serie A en 216 adquisiciones pero curiosamente es la liga que más vende. Hasta 299 salidas, sin contar vueltas de cesión, han concretado los británicos. Es decir, se han marchado 83 futbolistas más a las grandes ligas de los que han incorporado en este lustro. Un curioso rol vendedor dentro de este contexto que comparte la Ligue 1, autora de 192 incorporaciones y 206 salidas. La Bundesliga es algo más endogámica y aprovecha mercados menores, con lo que es la que menos firma (142) y la que menos deja escapar a sus rivales europeos (122).
En lo que respecta a las relaciones entre sí, la tendencia ha sido muy lineal. Como consecuencia de lo que señalamos, la Premier League es la principal compradora de Francia (67), España (63) y Alemania (46). Italia es la más cerrada a dejar ir a sus jugadores a Gran Bretaña y sus principales lazos son con la Ligue 1 (56). Y por el otro lado, es la Premier a donde más ha exportado LaLiga: hasta 97 jugadores salieron de la península hacia las islas.