Todo fue tranquilo para el Barcelona en la primera parte ante el Celta, a excepción de dos jugadas que complicaron a sus centrales. La primera, a Gerard Piqué, que fue salvado por la intervención del línea de Del Cerro Grande.
Denis Suárez le ganó la espalda a la defensa del Barcelona, pero porque estaba más de un metro en fuera de juego. De primeras, el colegiado mostró la roja directa a Piqué, pero el juez de línea evitó ese final.
La jugada del Celta fue bastante buena, pero Denis Suárez demostró que no es un delantero al uso, pues se metió demasiado pronto en fuera de juego. Por si acaso, Piqué no permitió que se plantara solo ante Neto.