Las jugadoras del SC Sand de la Bundesliga están dando una gran lección de solidaridad. Debido a la falta de mano de obra en el campo, han decidido cambiar el balón por la agricultura recogiendo fresas y espárragos.
"La rocogida tardó entre tres y cuatro horas, luego lavamos los espárragos y los pusimos en la máquina para clasificarlos. No hay comparación con el entrenamiento de fútbol, solo lleva 90 minutos", explicó a 'Der Tagesspiegel' Jenny Gaugigl.
"Por lo general, tenemos más movimiento durante el entrenamiento y estamos estresadas de manera diferente. Ese es otro tipo de esfuerzo cuando estás en el campo. Me molestó la espalda un poco, pero estuvo bien", señaló Dina Blagojevic.
Y añadió: "Los trabajadores de la cosecha y los trabajadores temporeros de la República Checa, Polonia y Rumania han fracasado porque no pudieron ingresar debido a la crisis del coronavirus. Luego nos preguntaron si queríamos ayudar. Estábamos felices de hacer eso y también nos divertimos mucho haciéndolo. Lo volvería a hacer en cualquier momento si necesita nuestra ayuda".
18 de abril de 2020
Lo mejor de su gran labor es que el salario que están consiguiendo por las duras jornadas de trabajo, unos 600 euros, lo donarán a los afectados por el coronavirus. Sin duda, una acción ejemplar.
17 de abril de 2020