Son ya muchas las cuentas y las fórmulas que hay escritas sobre el papel. En el último tramo del mercado de fichajes se está intensificando la negociación para tener a Neymar de nuevo junto a Messi, Suárez y compañía, pero siempre falla algún nudo.
El PSG tiene clara su postura y la sartén por el mango porque pretende exprimir hasta la última gota de lo que pueda ofrecer el Barcelona, enfocado en tener al delantero brasileño contento y de nuevo con el nivel que demostró cuando aterrizó en la Ciudad Condal.
Lejos de las lesiones y del rendimiento que ha dado en París, en el Camp Nou solo piensan en desbloquear la operación cuanto antes. La última oferta habría sido de 125 millones de euros, más el trapaso de Iván Rakitic y la cesión de Ousmane Dembélé.
Pues bien, el citado medio ha informado este jueves de que el extremo francés no está por la labor de aceptar la oferta del Barcelona y del PSG para irse en calidad de cedido durante esta temporada y añade que el jugador no está nada conforme con cómo se están desarrollando las cosas. Es más, habría reafirmado su posición al respecto, dejando claro que no tiene intención de hacer las maletas.
'Le Parisien' ha indicado que a Dembélé no le ha gustado que su club le haya puesto entre los elegidos para irse al PSG, aunque también debe saber que si llega Neymar tendrá mucho menos minutos de los que podría disfrutar en el Parque de los Príncipes.
A Dembélé tampoco le ha sido suficiente con el empeño y la aprobación del entrenador del equipo parisino Thomas Tuchel, el cual llamó al futbolista para intentar convencerle este miércoles pasado. "Es el único que se me ha declarado en rebeldía", recordó.
Además, el PSG seguiría en sus trece de recibir una buena cantidad de dinero y jugadores para dar el visto bueno al traspaso de Neymar, cuyo entorno cree que todo es posible hasta la última hora del mercado de fichajes.