Diego Garzón y la temporada 21-22 ya no irán de la mano nunca más. El futbolista granadino, que llegó al cuadro catalán procedente del Lleida Esportiu en invierno, tuvo que retirarse de un entrenamiento en la pasada semana tras sentir unas duras dolencias en su rodilla derecha. Tras las pruebas médicas pertinentes, Garzón ya conoce su lesión. Y las noticias no son esperanzadoras.
El lateral derecho del Terrassa FC sufre una una rotura del menisco externo y una rotura parcial del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha. Por lo tanto, deberá ser intervenido quirúrgicamente para poder iniciar el proceso de rehabilitación. El club barcelonés no ha querido informar del plazo estimado de baja, aunque rondaría entre los tres y los cuatro meses.
Garzón había resultado fundamental en el esquema del cuadro de Terrassa desde su llegada. Cuatro titularidades en cuatro apariciones, siendo clave en todos los encuentros y protagonista en la remontada clasificatoria que sigue acometiendo el Terrassa. Un final anticipado en una campaña para olvidar, sobre todo tras lo vivido en el apartado institucional en el Lleida Esportiu.