Qué poco pasó en el Anxo Carro. El encuentro fue muy competido e igualado. Hubo tensión y los futbolistas pelearon cada balón como si fuera el último, pero la batalla se libró en el centro del campo. Las porterías, por momento, fueron meras espectadoras de lo acaecido únicamente en la medular.
Dos oportunidades para marcar tuvo el Lugo y las dos terminaron en gol. Uno, tras un saque de banda; otro, a balón parado. Dos acciones. Dos chispazos que electrocutaron a un Tenerife que se marchó a las Islas Canarias con los bolsillos vacíos y con una pobre imagen sobre el terreno de juego.
Los primeros minutos, sin embargo, fueron de los de Luis Ramis, pero el tempranero tanto local apaciguó el ímpetu tinerfeño. Canella se asoció con Juanpe en el costado zurdo, ganó la línea de fondo y centró atrás desde la izquierda. Cristian Herrera llegó desde atrás e inauguró el electrónico de primeras. Pudo haber hecho algo -mucho- más Dani Hernández.
Con la mínima ventaja en el marcador, los 'albivermellos' dieron muestras de tener controlado el ritmo del partido. El Tenerife no generó ni una sola ocasión de peligro antes del descanso. Apenas un cruce de entradas entre Manu Barreiro y Aitor Sanz que el colegiado castigó con sendas amonestaciones fue lo que ocurrió antes del paso por los vestuarios.
Y en la segunda mitad, sorpredentemente, fue el Lugo el que saltó al terreno de juego queriendo la iniciativa, queriendo el balón, y proponiendo. Y tras un pisotón de Manu Apeh llegó el segundo tanto local: centro tocado de Hugo Rama, a balón parado y a pierna cambiada, que se cuela en el fondo de la portería sin que ningún jugador tocase el cuero. En el VAR revisaron un fuera de juego posicional, pero el tanto subió al electrónico.
Y entonces sí, los de Mehdi Nafti comenzaron a dormir el ritmo del partido. Mantuvieron muy juntas las líneas y provocaron que el Tenerife moviese el balón muy lejos de la portería de Ander Cantero, que no tuvo nada de trabajo. Solo un tiro a puerta de los 'chicharreros' que no le inquietó.
Joselu sí pudo recortar distancias a falta de diez minutos para la conclusión, pero su remate se marchó muy por encima del travesaño. Y esta jugada fue lo único reseñable de los últimos 30 minutos del partido, que no incidieron en el resultado final. El Lugo cortó la racha de tres triunfos seguidos del Tenerife y se colocó momentáneamente a tres puntos del 'play off' de ascenso.