Por ahora, el balance es bueno para los vitorianos. Tras dos empates y una victoria (además de las tablas en el choque amistoso frente a la Real Sociedad), el cuadro se sitúa en la séptima plaza de la clasificación. Se trata de una zona que la escuadra quiere frecuentar.
Tras el parón de selecciones, los de Asier Garitano tienen que volver a la acción ante un rival de gran envergadura: el Sevilla. El enfrentamiento será el 15 de septiembre y los celestes jugarán en casa, así que, dentro de la dificultad, tendrán el apoyo de su afición.
Siete días después, como suele ser normal, protagonizarán un intento de asaltar San Mamés ante el Athletic. Los bilbaínos son otro de los equipos más fuertes de la competición, así que se tratará de un choque muy duro y de un nivel altísimo.
Entonces, los efectivos solo podrán utilizar 72 horas para descansar, pues el próximo compromiso es contra la Real Sociedad el 26 del mismo mes. Para colmo, cerrarán una quincena de infarto recibiendo al Mallorca el 29, un encuentro al que llegarán con mucho cansancio acumulado.