El choque de la final de Copa entre Barça y Alavés tendrá lugar en el Vicente Calderón y a pesar de que el estadio cuenta con aforo para 55.000, la seguridad hará que se reduzca a 53.000 espectadores.
La Federación suele respartir alrededor de un 40% de las entradas a los equipos, por lo que el equipo alavesista recibirá aproximadamente unas 20.000 localidades para el gran encuentro.
De esta forma, el Alavés tendrá entradas suficientes para todos sus socios, que son 15.368. Una vez se conozca el número exacto, el club decidirá la forma para distribuirlas entre los aficionados.