El alcalde de A Coruña no cree que las obras de Riazor empiecen esta temporada

Además, ha opinado sobre el derbi gallego del próximo sábado ante el Celta, al que ha dicho que no sabe si acudirá, y ha apostado por el 0-1 a favor del Deportivo.
El Ayuntamiento de A Coruña rescindió el contrato adjudicado a la empresa Dragados para la reparación de las cubiertas de Riazor porque la constructora no consideraba viable la ejecución del proyecto.
Este viernes, según explicó el alcalde en una entrevista con Radio Marca Coruña, se formalizará esa rescisión en la Junta de Gobierno y se iniciará un nuevo proceso que implicará la rehabilitación de las cubiertas de los fondos del estadio de Riazor y la instalación de una nueva estructura en las de Preferencia y Tribuna.
El regidor municipal afirmó que desde el Gobierno local intentarán "acelerar el proceso de tramitación, que lleva su tiempo", y admitió que es "difícil que las obras se inicien esta temporada".
En todo caso, aseguró que los espectadores no corren "ningún tipo de riesgo esta temporada" y, cuestionado sobre los "desprendimientos" que causaron los temporales la campaña pasada, afirmó que el Ayuntamiento hará una "labor de mantenimiento" para evitar que caigan trozos de la cubierta.
Además, explicó que la nueva actuación prevista en Riazor, que es de titularidad municipal, va a rondar los cuatro millones de euros y dejó abierta la posibilidad de que "otras administraciones ayuden".
Sobre el derbi gallego del próximo domingo, Xulio Ferreiro apostó por un 0-1 a favor del Deportivo, aunque también le "vale" un 1-2 y respecto a su presencia en Balaídos dijo que está pendiente de si acude o no el regidor de Vigo, Abel Caballero.
Ferreiro dijo, con socarronería, que cree que su homólogo en Vigo "tiene un asunto importante en Madrid".
"Creo que tienen una decisión que tomar", insistió el alcalde de A Coruña, sabedor de que el PSOE ha convocado para el domingo, día del derbi gallego, al Comité Federal para una reunión en la que se votará la posición política del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso ante el proceso de investidura.
"Sería raro por protocolo que fuera el alcalde de A Coruña (al palco de Balaídos) y no el de Vigo", comentó Ferreiro, quien también se congratuló de que el Deportivo no esté expuesto, en principio, a que un inversor se haga con el control del club, algo que sí sucede en el Celta, tentado por el interés de un grupo chino.
"Una de las grandes virtudes del Deportivo es que tenga el accionariado repartido, una decisión muy bien tomada en su momento. Yo creo que (la posibilidad de que un inversor controle el club) es un peligro descartado", sentenció.