El Atlético investiga si Racionero entró al estadio tras el apuñalamiento

Unos sucesos que se dieron fuera del estadio colchonero, en uno de los bares del barrio y que acabaron con el apuñalamiento de un hincha 'colchonero' por un antiguo integrante del Frente Atlético.
La investigación sigue su curso y ahora cuenta con la declaración del presunto autor, Ignacio Racionero, que, según 'El Mundo', sólo lleva unos meses en libertad tras estar 10 años en la cárcel por varios delitos. Entre ellos se incluye la investigación como parte de la muerte de Aitor Zabaleta, el hincha de la Real asesinado en los aledaños del Vicente Calderón.
Las versiones del ultra y del agredido no coinciden. Racionero, el detenido, explicó que nunca antes había visto al agredido y que éste se le acercó en el bar, ebrio, y le habló de muy malas formas mientras él hablaba con María, una amiga. Confesó que le hincó una navaja en una pierna.
"Nos empezamos a pegar y lo que hice fue defenderme. Nos peleamos, pero dentro del bar estaban todos los amigos del chico que se metieron en medio y me rodearon. Saqué una navaja de pequeñas dimensiones y le di en la pierna al chico", explicó el ultra.
Además, añadió que soltó varios golpes de navaja más porque se sintió rodeado, pero que no sabía si había herido a alguien en el hombro o en el brazo.
Sin embargo, la versión del herido es muy distinta. Éste afirmó que fue Racionero, ahora en prisión provisional comunicado y sin fianza, se metió con él cuando hablaba con la chica, que fue atacado y apuñalado sin mediar palabra. Fue trasladado al hospital con heridas de arma blanca en el hombro, la espalda y el muslo.
El Atlético investiga una de las partes de la declaración del ultra, que afirma que tras la pelea se fue tranquilamente a ver el partido. El autor que forma parte de la investigación afirmó que, tras el suceso, "entró al campo del Metropolitano, ya que un amigo le había dejado un abono", pero no se sentó en la Grada de Animación.
Al club rojiblanco no le constaba que ninguno de los dos implicados hubiera ido al partido y hubiese sido imposible que Racionero entrase en la Grada de Animación, ya que el Wanda Metropolitano tiene medidas de seguridad muy fuertes y hay que acceder media huella digital.
Además, todos los abonos en los que se ubica el Frente Atlético son personales e intransferibles y todos los abonados deben tener en el carnet una foto. Sin embargo, si el ultra contaba con un abono de adulto normal si pudo entrar en el estadio y aparentemente no habría contravenido ninguna norma.
No cumplir con las normas acarrea sanciones, temporales y permanentes, y el Atlético ya expulsó a un buen número de aficionados que eran socios por la pelea que derivó en el asesinato del ultra del Dépor Jimmy.