"El Barcelona no ha negociado con ningún jugador por lo que entendemos que no se ha cometido ninguna irregularidad", aseguró al diario 'MARCA' un portavoz del Barcelona.
Todo comenzó con unas desafortunadas palabras de Guillermo Amor, en las que insinuó dicho contacto, unas declaraciones poco acertadas y que han generado un gran escándalo en el fútbol español.