Pese a ser de pretemporada, este partido destaca por ser uno de lo más atractivos que se puede ver en Europa, y en Estados Unidos ha generado una gran expectativa, y también por el reciente historial que ambos arrastran por los enfrentamientos en finales de la Liga de Campeones.
En primer lugar, éste será el primer partido en el que se verán las caras Barcelona y Manchester United desde que se enfrentaran en la final del 2011, pero aunque apenas haya nada en juego los ingleses tendrán ganas de revancha ante el que por los resultados de la pasada temporada es el mejor equipo de Europa.
Ambos equipos también se jugaron la Copa de Europa en la edición del 2009, siempre con triunfo culé.
El mismo delantero inglés del United Wayne Rooney demostraba que todavía no ha olvidado las derrotas en ambas finales al reconocer que los azulgrana "fueron mejores". El capitán de los Diablos Rojos fue el autor del 1-1 en la final del 2011, que de poco le sirvió a su equipo, que acabó perdiendo 3-1.
También será una nueva oportunidad para ver a los menos habituales como Sergi Roberto o Marc Bartra, y a los Sandro, Munir y compañía, que tan buen papel hicieron en el primer partido ante Los Ángeles Galaxy (1-2) y que este año deben dar un paso al frente para que no se les escape el tren del protagonismo en el primer equipo.
Otro de los alicientes está en el banquillo, en el que el técnico Luis Enrique Martínez se reencontrará con el que fue uno de sus entrenadores durante su etapa como jugador azulgrana: Louis van Gaal.
El holandés coincidió con él en sus dos etapas como azulgrana y doce años después volverán a verse las caras, esta vez ambos en el banquillo, pero en equipos diferentes.
El técnico del Manchester, además, es uno de los entrenadores interesados en el fichaje de Pedro Rodríguez. Más ahora con la más que posible marcha de Ángel di María al Paris Saint Germain.
El conjunto inglés se quedaría huérfano en la banda y Van Gaal sabe que el canario sería un refuerzo de lujo para un equipo que desde que perdió las dos finales contra el Barça parece no levantar cabeza, hasta el punto de que hace dos temporadas ni se clasificó para jugar en Europa.
Por otro lado, éste será el primer encuentro que podrá ver en directo Josep Maria Bartomeu, quien ha volado a Estados Unidos para estar con el equipo, después de haber ganado las elecciones a la presidencia el pasado sábado.
Estos días ha protagonizado varios actos en nombre del club y se ha reunido con los miembros de la plantilla y del cuerpo técnico, pero todavía no ha presenciado como presidente renovado ningún partido del conjunto de Luis Enrique.
Este encuentro será el segundo de la 'International Champions Cup', de la que el Barça todavía deberá disputar dos partidos: uno ante el Chelsea en Washington el próximo martes y otro ante el Fiorentina el próximo 2 de agosto, en Italia.
Los azulgrana son ahora mismo los quintos de esta competición, que cuenta con diez equipos, en la que cada uno de ellos sólo juega cuatro partidos.