Siempre hay una primera vez, para lo bueno y para lo malo. Se enfrentaron en Son Moix dos equipos con muy malos números a domicilio, pero el Betis se estrenó lejos de casa en una lección de efectividad.
Una cualidad que no tuvo en ningún momento su rival. El Mallorca gozó de incontables clarísimas ocasiones en el segundo tiempo para quedarse con algún premio. La fortuna y Joel impidieron la machada bermellona.
Los de Vicente Moreno desecharon los primeros 45 minutos. Tuvieron demasiado respeto hacia un Betis con mordiente en ataque para optar por Europa. Y este sábado, más que nunca, lo demostró.
Una pena máxima pronto le encarrilaría el encuentro. En un balón muerto, Baba estuvo realmente lento y derribó a un astuto Fekir en el área. Joaquín asumió el protagonismo y transformó el disparo con suma tranquilidad y liderazgo de capitán.
Reaccionó el Mallorca volcando su ataque a la banda izquierda, donde Lumor fue un quebradero de cabeza continuo. Pero la presión no era suficiente para incomodar al Betis, que salía desde atrás con suma facilidad.
Fran Gámez salvó hasta dos veces un gol en la línea y Loren rozó el 0-2. Sobre la media hora de choque, Joaquín volvió loco a Valjent y estuvo a punto de protagonizar la jugada del partido en tierras mallorquinas.
Y como era de esperar, a la contra, el Betis golpeó de nuevo a su rival. Salida de balón fabulosa y Fekir lo hizo todo. Como si de un mago se tratara, el francés hizo aparecer un gol de la nada, con un disparo seco desde la frontal a la cepa del poste.
El Mallorca, perdido, cambió el guion del duelo en el segundo tiempo. Con la salida de Lago Junior en el descanso, el equipo bermellón se conectó y se metió muy pronto en la contienda.
A los diez minutos tras la reanudación, Lago Junior materializó un penalti de Guardado sobre Dani Rodríguez. Clarísimo, como el dominio del Mallorca sobre un Betis que se vino abajo y cedió demasiado terreno.
Dani Rodríguez gozó de un par de oportunidades claras antes del carrusel de cambios. Ante la desesperación, Lumor fue expulsado por doble amarilla. Abdón aportó más madera para el ataque local, pero Joel se erigió en el héroe verdiblanco. Lo paró todo para que el Betis de Rubi emergiera con tres puntos que esclarecen el panorama.