El buen momento del Bournemouth, que acumula cinco partidos sin perder, devolvió a la realidad al Leicester, que pareció despertar la pasada jornada con una victoria ante el Nottingham Forest pero que permanece anclado en la penúltima posición de la Premier, en zona de descenso, tras perder este sábado.
Las intenciones de prolongar la mejoría del cuadro de Brendan Rodgers se estancaron en el Vitality Stadium, donde llegó alentado por su primer triunfo del curso después de cuatro derrotas seguidas. Regresaron a la derrota los 'foxes', cada vez más alejados de la salvación y con malas sensaciones. No dio esa sensación al principio del duelo en Bournemouth. A los diez minutos, el Leicester se puso por delante con el tanto de Patson Daka.
Reaccionó el equipo de Gary O'Neil, pero no vio la forma de batir a Danny Ward hasta bien entrada la segunda parte. Después, lo hizo en tres minutos. Empató en el 68' gracias a Philip Billing y se puso por delante en el 71' con un gol de Ryan Chrisitie tras recibir un balón de Dominic Solanke. Ahí se vieron las carencias de los visitantes, incapaces de recuperar la iniciativa para poner en aprietos a los locales.
Los 'cherries' se hicieron con el triunfo. Acumula cinco partidos seguidos sin perder y está acomodado en la parte alta de la clasificación. El Leicester, penúltimo, está anclado en el descenso.