Garrido se retiró en los últimos minutos del encuentro ante el Betis tras sufrir unas molestias físicas y en la jornada de este miércoles ha sido evaluado por los servicios médicos del club gaditano.
El doctor Antonio Fernández Cubero le ha realizado diferentes pruebas que han arrojado la existencia de una "sobrecarga en el bíceps femoral", que le deja "pendiente de evolución" para el próximo partido de este sábado contra el Rayo Vallecano, según la nota informativa del club.