El Cádiz se queda en Mallorca con cara de tonto

El VAR llegó hace unos años al fútbol para quedarse para siempre, pero las dudas sobre su utilidad siempre van a seguir ahí. Esta herramienta venía para ayudar a los colegiados en su labor, pero hay algunas interpretaciones que dejan generan muchas más dudas.

El Cádiz, inmerso en la pelea por la salvación, se vio perjudicado, a su juicio, en una acción entre Ledesma y Ángel Rodríguez. El cancerbero salió a despejar un balón y se llevó puesto al tinerfeño, algo que muchos entienden como un lance normal del juego aéreo de los porteros.

Pero el árbitro, que fue a ver el VAR, lo tuvo bastante claro y entendió que el guardameta se excedió. Todo el Cádiz se echó las manos a la cabeza y protestó de forma ostensible una decisión que fue determinante para el devenir del encuentro.

Antes de todo esto, el conjunto andaluz salió con una mejor cara que su rival y en el minuto ocho se adelantó en el marcador. Rubén Alcaraz, una de las caras nuevas, recibió cerca de la frontal del área y firmó un golazo. Sergio Rico no pudo hacer nada tras la rosca que cogió el esférico.

El silencio se hizo en Son Moix, pero poco duró. Y es que el Mallorca salió espoleado tras ese tanto y tardó poco en empatar. Muriqi avisó a Ledesma con un cabezazo y el portero reaccionó de forma extraordinaria. Fue el preludio de lo que iba a venir después.

Alejo perdió de vista a Brian Oliván, le agarró y el árbitro indicó el punto fatídico. Salva Sevilla tomó la responsabilidad y batió con mucha sangre fría al portero. 1-1 y vuelta a empezar para los dos.

Los de Luis García Plaza no se relajaron tras el tanto y trataron de irse al descanso con ventaja. De hecho, los baleares se toparon con el poste en dos ocasiones: en una de Kubo tras un pase previo de 40 metros y en otra de Ángel Rodríguez tras una volea desde la frontal.

El penalti de la discordia

El Mallorca se veía muy superior al término de la primera parte y en la segunda mitad no cambió su plan. Estaba más cerca el 2-1 que el 1-2 y en una acción que generó mucha polémica llegó el tanto de los bermellones.

En el 61', Ledesma salió a despejar un balón y se llevó puesto a Ángel. El árbitro, que vio mucha peligrosidad en el salto, fue a ver la acción en el VAR y decretó el punto de penalti.

Algunos entendieron su decisión porque el portero se excedió en el salto, pero también hay quienes creen que eso es una acción normal en el juego aéreo, un lance del juego. El Cádiz estalló y esa determinación del colegiado marcó el devenir del partido.

Y decimos esto porque Muriqi acertó en la pena máxima y firmó el definitivo 2-1. Los de Sergio González trataron de reaccionar, pero no tuvieron la oportunidad de hacerlo. Solo Negredo estuvo cerca sobre el final, en un balón que se le fue demasiado alto.

Abdón, que entró ya sobre el final, pudo ampliar la ventaja pero se topó con el poste. Victoria balsámica del Mallorca ante un rival directo al que deja a cinco puntos. En Cádiz no terminan de creérselo.