Nuevo espectáculo en Celtic Park. El Celtic, con tan solo diez jugadores, consiguió los tres puntos contra el Dundee United con un gol en el minuto 90.
Por todo el mundo, parecía una de esas tardes negras, con Nir Bitton expulsado tarde y los 'celtas' perdiendo una oportunidad tras otra. Pero con el corazón acelerado y los nervios discutiendo, Abada intervino justo al filo del minuto 90 para ganar y meter presión a un Rangers que tropezó este fin de semana.
La tarde comenzó con un merecido homenaje a Win Jansen, el ex entrenador del Celtic que murió a principios de esta semana a la edad de 75 años. Jansen solo estuvo en el banquillo durante 12 meses, pero hizo que ese año valiera la pena, ganando una Copa de la Liga y el título de Liga en 1998.
En el arranque, fueron los visitantes los que tuvieron la primera ocasión de gol, con el lateral izquierdo Adrian Sporle disparando desviado de volea dentro del área. Eso pareció despertar a los 'hoops', ya que un minuto después Giorgos Giakoumakis estuvo a punto de estrenar el marcador.
En los primeros 25 minutos no hubo mucha acción, pero luego Adaba encendió el juego con un juego de pies brillante dentro del área para enviar un tiro a puerta, pero Benjamin Siegrist atajó bien. A partir de entonces, fue un monólogo del Celtic.
La mejor ocasión de la primera parte la tuvo el debutante en casa Matt O'Riley a los 40 minutos. El gran trabajo de James Forrest por la izquierda se impulsó al veloz mediocampista, que solo pudo rozar el poste derecho con su disparo.
Ya en el segundo tiempo, mientras Ange Postecoglou buscaba el gol del triunfo, hubo un momento especial para Ben Doak, de 16 años, quien salió del banquillo para su debut. Pero a falta de nueve minutos para el final, Bitton recibió su segunda tarjeta amarilla del partido por una falta en el borde del área 'celta'.
Sin embargo, el Celtic no permitió que eso le afectara mientras seguían presionando, en busca de ese gol ganador crucial. Cuando todo parecía perdido, Jota se metió por la derecha y remató al área para Abada, que con toda la presión controló el centro y disparó de cerca por la escuadra izquierda. La Liga Escocesa se aprieta por arriba.