El 11 de septiembre, el Benfica fue condenado a jugar un partido a puerta cerrada debido a unos incidentes con sus aficionados en la temporada anterior, de modo que el encuentro ante el Oporto es un incógnita.
El club envió un recurso que la Federación Portuguesa de Fútbol ha rechazado, de modo que el Benfica pasó a abrir un periodo de alegaciones, pero no ha habido suerte.
El Benfica no quiere que el 'Clásico' frente al Oporto se juegue a puerta cerrada y ha recurrido, según informó el diario 'Marca', al Tribunal de Arbitraje del Deporte.
El 'Clásico' se jugará el siete de octumbre, así que el Benfica tiene algo más de una semana para conseguir esquivar la sanción que cae sobre el club.