La UEFA permitió antes de esta ventana de Liga de las Naciones la entrada de aficionados hasta un 30% del aforo, aunque en cada lugar variaría en función de las restricciones de los gobiernos.
Esto está dejando imágenes dispares en cada partido. De cara a este miércoles, uno de los que sí tendrá seguidores en las gradas será el Croacia-Francia que se disputará en el Estadio Maksimir de Zagreb.
Durante los últimos días, la Federación Croata ha autorizado la venta de entradas tras consensuarlo con las autoridades locales, lo que permitirá la presencia de 7.000 aficionados.
El pasado domingo ya hubo seguidores contra Suecia tras un año desde el último partido con público, y estos volverán a estar presentes ante Francia. Eso sí, no se permiten hinchas visitantes, solo locales.