A punto de cumplir los 42 años, Pizarro ha decidido afrontar una nueva aventura dentro del mundo del fútbol. El peruano es el nuevo embajador del Bayern, un club en el que ha ganado cosas inimaginables.
El 'Bombardero de los Andes', en una entrevista concedida a 'AS', explicó por qué decidió unirse a la disciplina bávara tras retirarse hace casi tres meses.
"Bayern y Werder Bremen son los clubes de mi vida. Cuando decidí irme de Perú, el Werder fue quien me dio la oportunidad de comenzar mi andadura en Europa. Después, el Bayern me permitió entrar en otra dimensión. En Múnich gané la mayoría de mis títulos y di el salto a la élite. Siento mucha ilusión por volver a formar parte de esta familia", empezó diciendo el ex jugador.
En relación a ese cariño por el 'Gigante de Baviera', esto dijo Pizarro: "El triplete de 2013, sin ningún tipo de duda. Fue un año fuera de lo normal. Llegué al club justo en el momento de su mayor fracaso: la derrota en la final de la Champions en el Allianz Arena ante el Chelsea. Fui al campo por las negociaciones que estaba manteniendo con el club en aquel momento y lo sufrí en mis propias carnes".
"Sentí la decepción y el dolor de una ciudad entera. Cuando comencé la pretemporada con el Bayern unas semanas después, percibí esa rabia. Pero, a la vez, noté un espíritu ganador que, finalmente, nos llevó a ganar esa ansiada Copa al final de la temporada. Haber formado parte de eso es algo indescriptible", añadió.
Por último, Pizarro habló sobre su retirada y admitió que "el cuerpo no perdona". "Uno de los motivos por los que decidí poner punto y final a mi carrera fue la falta de tiempo. Quiero disfrutar más de mi familia y esta profesión no te lo permite. Por ello, estoy muy contento de que el Bayern me haya dado la oportunidad de comenzar esta primera etapa después de mi carrera como embajador. Estoy seguro de que el tiempo me irá abriendo alguna que otra puerta más, pero, de momento, estoy muy feliz de poder representar a un club que amo", concluyó.