No se puede imaginar lo que sentiría el cuerpo técnico del filial del Southampton al ver que el Chelsea, mediante su Twitter oficial, anunció que Zouma, Terry, Van Ginkel, Cesc Fàbregas y Batshuayi formarían parte del once inicial de su segundo equipo.
Our #CFCDev XI today is Eduardo; Zouma, Terry, Tomori; Dabo (c), Van Ginkel, Fabregas, Aina; Solanke, Batshuayi, Mount.
— Chelsea FC (@ChelseaFC) 21 de noviembre de 2016
Así pues, estuvieron sobre el campo, entre otras cosas, un ganador de Premier League y Champions como John Terry y alguien como Fàbregas, que en su carrera ha levantado desde un Mundial y dos Eurocopas a una Liga Española.
En total, dos defensores centrales (uno de ellos, el capitán de la primera plantilla), dos centrocampistas y un delantero de talla mundial se enfundaron la camiseta del equipo de desarrollo del conjunto londinense para defender sus colores en otra categoría.
Quedan pocas dudas de que esta formación ha sido el mejor once nunca visto en la historia de la Premier Sub 21 aunque un equipo no es sólo cuestión de cinco jugadores, algo que quedó patente viendo el resultado del partido: 3-2 a favor de los 'blues'.
De hecho, el Chelsea, pese a su genial defensa, comenzó perdiendo por un tanto de Olomola en el minuto 5. Batshuayi puso tablas al llegar al cuarto de hora, pero su gol fue respondido inmediatamente con un tanto de Sims, colocando un 1-2 provisional.
Aunque los 'grandes' se pusieron las pilas tarde para tratar de poner orden, anotando otro gol Batshuayi en los últimos cinco minutos y dejándole a Van Ginkel que firmara la diana difinitiva que significó la victoria.
La razón por la que las cinco estrellas bajaron al filial no fue otra que la de acumular minutos. Fàbregas no ha contado desde el inicio para Conte. Terry, al igual que Zouma, no han tenido continuidad después de sus respectivas lesiónes. Van Ginkel también sufrió hace meses una fractura en el hombro y necesita retomar sensaciones y Batshuayi, simplemente, necesita más continuidad y el técnico italiano no considera que esté en condiciones de jugar en el primer equipo.
Sin duda, es una buena medida de Conte para dar continuidad a los jugadores que más lo necesitan. ¿Creará escuela el entrenador 'blue'? ¿Te imaginas a Cristiano en el Castilla o Messi en el Barça B?