Espanyol y Atlético de Madrid se repartieron los puntos en el choque de este domingo en Cornellà-El Prat. Stefan Savic abrió la lata para los locales en propia puerta y Saúl Ñïguez estableció el definitivo 1-1 con un golazo desde la frontal del área.
El duelo estuvo cargado de ocasiones y, como no podría ser de otra manera, de polémica: los blanquiazules pidieron un posible penalti sobre Wu Lei por un agarrón que no fue señalado.
Tras el pitido final, el portavoz deportivo del club, Joan Capdevila, por ejemplo, lamentó lo ocurrido: "Nos sentimos perjudicados una vez más".
En el Espanyol comienzan a estar cansados con los arbitrajes de cada fin de semana y, sobre todo, con la doble vara de medir del VAR, ya que creen que también fueron perjudicados ante el Valladolid, Villarreal, Real Madrid, Athletic Club y Valencia.