El ariete dejó su primer recado de goleador en la semifinal contra Ucrania. El futbolista abrió el marcador de lo que, a la postre, resultaría un abultada victoria por 5-0 para los lusos.
En la final, Pedro Correia partió como suplente e, incluso, el técnico Hélio Sousa no lo sacó en los 90 minutos reglamentarios. Cuando el partido estaba empatado a dos tantos, el luso ingresó en el terreno de juego de Seinajoki en el minuto 100.
Su entrada fue trascendental, ya que en el 104' dio el pase de gol para que João Filipe hiciera el 2-3, aunque poco más tarde los italianos volvían a empatar. Los jugadores portugueses, tras sacar del centro del campo por el gol recibido, trenzaron una buena jugada por la izquierda y el esférico le llegó por alto a Correia. Al borde del área lo bajó, se revolvió y cruzó la bola para hacer subir el definitivo 4-3.
Tras el final del encuentro, la locura se desató entre los seguidores en Portugal, que esperaba con ansia la llegada de los que han denominado héroes por la victoria cosechada. Correia, tras acabar el partido, aseguró a los medios de comunicación que siempre tuvo la ambición de vivir esa final.
"El fútbol es esto. Creer y trabajar para lograr nuestros objetivos. Eso fue lo que pasó", manifestó. De manera especial, el cambio de aires que le dio a su carrera futbolística le ha beneficiado, como ha dicho en algunas ocasiones.
Salió del Benfica hace dos años rumbo a los juveniles del Deportivo de la Coruña. La pasada temporada ya debutó con el filial blanquiazul. Pieza clave en el Juvenil A del Dépor, Correia fue llamado por Portugal, con la que llegó a disputar seis encuentros antes del Europeo Sub 19.
Entre los compañeros de Correia se encontraba otro portugués que milita en las categorías inferiores del Deportivo de la Coruña, el portero Ricardo Benjamin. El guardameta entró en la convocatoria final en el último suspiro, ya que fue llamado por el seleccionador debido a la lesión de Diego Costa.
En el aeropuerto y en Lisboa fueron aclamados y aplaudidos por sus paisanos. Este martes los reconocimientos fueron más allá. Marcelo Rebelo de Sousa, presidente de Portugal, los recibió en el Palacio de Belem. Una vez allí, Rebelo de Sousa avanzó que toda la plantilla será condecorada con la Orden de Mérito.
Los jugadores más sobresalientes de la plantilla portuguesa ya empiezan a sonar como posibles fichajes para grandes clubes. La mayoría juegan en categorías inferiores y, como mucho, han llegado a entrenarse alguna vez con los primeros equipos.