Ha sido el último nombre en sonar para los blancos, pero el interés por el joven futbolista malagueño se ha incrementado a una velocidad considerable en las últimas horas. Tanto que 'Marca' ya lo da por fichado para la próxima temporada.
No son pocas las similitudes que tiene con el otro gran nombre en la actualidad blanca. Brahim e Isco comparten ciudad de nacimiento, estilo de juego e incluso ahora situación en sus respectivos equipos.
Tanto el de Arroyo de la Miel como el de la capital de la Costa del Sol son seguidores del fútbol vistosos. El talento, la calidad técnica y, en definitiva, la magia en las botas.
El hábitat también es común. Brahim incluso ha llegado a jugar como 'falso 9' (tiene algo de mejor trato con el gol), pero, al igual que Isco, donde mejor se desenvuelve es en la zona de la mediapunta. Cuanto más libre, mejor, especialmente detrás de un delantero con el que hacer auténticas diabluras.
Los últimos acontecimientos del '22' blanco también le igualan a Brahim. Este no quiere renovar con el City por los pocos minutos en la primera plantilla, mientras que Isco no parece tener mucha bola desde que Solari llegó al banquillo blanco.
Pero también existen diferencias, especialmente en los orígenes. El del City perteneció a las filas de la cantera del Málaga, que lo reclutó del Tiro Pichón, un equipo de barrio donde dio sus primeras pinceladas de 'crack'. Los de Mánchester llegaron bastante pronto a su vida, ya que se marchó a Inglaterra con apenas 14 años. Desde ahí, su ascenso ha sido meteórico y apunta desde hace tiempo al Olimpo del fútbol.
Isco no tuvo paso por las inferiores de la entidad blanquiazul. Desarrolló su fútbol en el Benamiel hasta que el Valencia le echó el ojo. Eso sí, tuvo la opción de vestir los colores de su ciudad con su fichaje por un Málaga de Champions. Al-Thani lo 'rescató' del filial valencianista, donde creían que aún necesitaba más tiempo. Su fichaje por el Madrid y su consiguiente crecimiento dentro del club demuestran que la suya fue una llegada al estrellato con un ritmo controlado, quemando etapas y evolucionando paulatinamente.
30 de noviembre de 2018