Avisó Manolas de que no le saludaría cuando lo viera en el campo. Luego fue la propia Roma la que lo 'borró' del mapa tachando su nombre de la alineación del Barcelona. Malcom no dijo nada... y esperó hasta que pudo hablar sobre el campo.
Lo hizo de la mejor manera, marcando un gol ante el equipo que quería venganza por lo que sucedió hace poco más de una semana, cuando, pese al acuerdo cerrado entre Roma y Girondins, Malcom no se montó en el avión que despegó desde Francia hasta la capital italiana para acabar fichando, al día siguiente, por el Barcelona.
El delantero brasileño saltó al césped con la motivación de hacer un gran partido ante el club que le había declarado la guerra. Como si de un 'killer' puro se tratara, el brasileño aprovechó un pase de la muerte de Jean-Yves Tabla para mandar el balón a las redes de la meta romana y poner el 2-1 con el que el Barça desempató el choque justo después del descanso.
1 de agosto de 2018