El Real Madrid quiere, y necesita, reforzar su centro del campo para un futuro cercano. La llegada y el rendimiento de Camavinga han puesto en relieve el gran despliegue físico que necesita en determinados partidos.
Uno de los jugadores que está en la agenda blanca es Aurelien Tchouaméni. El joven futbolista francés podría hacer el papel de un Casemiro que no tiene un relevo natural en la plantilla.
'AS' indicó que las negociaciones con el Mónaco, su club, son fluidas y que en las últimas semanas se han dado pasos hacia adelante para confirmar la llegada del centrocampista.
Sin embargo, aseguró la misma fuente que el acuerdo entre las dos entidades está aún lejos de producirse. El motivo no es otro que el montante económico de la operación.
El Mónaco ha tasado a su joven estrella en 60 millones de euros, un precio que, por el momento, no está dispuesto a asumir el Real Madrid por un jugador que aún no ha dado su mejor nivel.
Pese a todo, el club blanco confía en poder cerrar la incorporación de uno de los centrocampistas con mayor proyección y que, a sus 22 años ya ha sido internacional con Francia.