El Málaga ya ha empezado a diseñar su plantillla para el próximo curso, pero aunque ya haya firmado algún jugador, el club está estancado a la espera de alguna salida.
Los descartes de Míchel son uno de los factores que frenan la planificación del cuadro de la Costa del Sol, además del retraso de la salida de Sandro. La salida de los descartes liberaría aproximadamente 10 millones de euros en fichas, que supone sobre un 25% del límite salarial de LaLiga.
El Málaga está pendiente de encontrar salida a jugadores como Kameni, Koné, Villanueva, Peñaranda, Santos, entre otros, que aportarían ingresos económicos al club para poder continuar con el diseño del equipo para el próximo curso.