El encuentro entre el Málaga y Las Palmas sirvió para que los blanquiazules sumaran otra jornada sin perder como locales. Los de José Alberto consiguieron su segunda victoria consecutiva al vencer por 2-1 ante un cuadro canario que ofreció un juego muy serio y mereció, al menos, puntuar.
Pese a la lluvia, La Rosaleda registró una entrada espectacular para esta ocasión. Más de 20.000 espectadores se congregaron en el feudo malaguista para llevar en volandas a los de José Alberto hacia su segunda victoria consecutiva.
Pese al aguante de la afición, el Málaga sufrió para controlar el partido, ya que los de Pepe Mel llevaron la batuta incluso en los momentos más adversos. Las ofensivas del conjunto visitante fueron constantes durante casi todo el partido, gracias a la conexión entre Jesé y Jonathan Viera.
Hasta tres ocasiones claras tuvo Las Palmas en la primera mitad. Sin embargo, un inmenso Dani Martín apareció siempre que se le necesitó y firmó un gran encuentro con espectaculares paradas. Además, la madera también hizo de las suyas cuando Clemente tuvo una ocasión muy clara en el minuto 21.
El Málaga no controlaba, pero supo jugar sus cartas. De hecho, el gol llegó al aprovechar una de las pocas ofensivas con peligro de la primera mitad. Víctor Gómez conectó con Brandon, que pudo asistir con éxito a Antoñín. El joven malagueño solo tuvo que empujar el balón ante la meta de Raúl Fernández.
Todo salió del revés para Las Palmas. Buscaron con insistencia el empate, aunque el premio no llegaba. Además, se quedaron con diez jugadores en el minuto 52 cuando Loiodice vio la segunda amarilla. La expulsión fue polémica, ya que no llegó a tocar a Paulino, aunque la jugada no se revisó al no ser roja directa.
Pese a la inferioridad numérica, los de Pepe Mel no bajaron los brazos. Su recompensa llegó en el 77' cuando Benito Ramírez aprovechó que Peybernes se durmió en los laureles para robarle el esférico desde atrás y poner el empate.
Tras este revés, el Málaga buscó de nuevo la victoria y el ambiente de La Rosaleda hizo el resto. Finalmente, Sekou Gassama apareció en el 85' con un potente testarazo tras un saque de esquina, firmó su primer tanto como malaguista y desató la fiesta en el estadio.
El 2-1 fue el resultado definitivo y supuso la segunda victoria consecutiva para el Málaga, que sigue intratable en como local y acecha los puestos de 'play off'. Las Palmas, por su parte, se fue de vacío tras hacer méritos más que suficientes para, al menos, puntuar en la Costa del Sol.