Boca Juniors e Independiente se veían las caras en La Bombonera. El partido tenía varios focos de atención. En la grada estaba Riquelme, en el banco se sentaba Russo y sobre el verde jugaba Pablo Pérez.
De los tres, fue el ex del 'Xeneize' quien se llevó todos los focos. El mediocentro lo hizo todo bien y se cargó su propio trabajo a falta de 15 minutos para el final del choque.
Russo hizo un buen planteamiento frente a Pusineri. Durante los primeros compases se vio a un Boca con buen ritmo que encerró al 'Rojo' en su propio campo.
Pero los de Avellaneda fueron empujando con un Pablo Pérez que no paraba de aparecer por todos lados. El mediocentro cortaba balones y los filtraba en ataque con la misma facilidad.
La expulsión de Izquierdoz también ayudó a que Independiente ganase enteros. Fue entonces cuando empezó el 'show' de Marcos Díaz. Dos paradones evitaron el primer tanto del partido.
Tampoco tuvo fortuna Franco, que se encontró con la madera en la única vez que pudo superar a Díaz. Fue entonces cuando Pablo Pérez tuvo su primera opción de gol con un cabezazo blandito.
Tras volver de los vestuario disfrutó de la segunda, con un disparo lejano que se le envenenó a Díaz. En la tercera, abrió demasiado el pie en un disparo cruzado y se marchó rozando el poste.
Después de todo lo bueno, llegó lo malo. Como si de un 'déjà vu' se tratase, a Pablo Pérez se le cruzaron los cables y terminó expulsado por una tremenda entrada sobre Capuzano.
Tras igualarse las fuerzas, el partido volvió a igualarse y ninguno pudo decantar la balanza a su favor. Reparto de puntos. A Boca se el escapa River y a Independiente, todo.